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El Banco de España ofrece la CAM a La Caixa si rompe con Cajastur

La caja catalana está estudiando la operación - La alicantina cuestiona al consejero delegado y la asturiana quiere rebajar la valoración de sus activos

Íñigo de Barrón

Lo que mal empieza mal acaba o se complica hasta extremos peligrosos. Este es el caso de la fusión de Cajastur con la Caja Mediterráneo (CAM, además de Caja Cantabria y Extremadura), que debía formar la tercera entidad con 124.127 millones de activos. Solo su tamaño ya convierte el asunto en nitroglicerina. Además, Cajastur ha recibido 2.475 millones de ayudas públicas para absorber Caja Castilla-La Mancha y tiene previsto percibir hasta 3.000 millones del FROB. La solución definitiva se sabrá el 30 de marzo, cuando se celebren las asambleas.

Sin embargo, la CAM, que fue la cuarta caja de España, es demasiado grande y está demasiado débil para quedar a su suerte. Por eso, el Banco de España tiene un plan B: ha ofrecido la entidad alicantiva a La Caixa, según fuentes del mercado. La caja catalana sopesa la operación, que le exigiría pedir ayudas públicas, y supondría rehacer sus previsiones y esquemas en Caixabank. Fuentes de la entidad no se pronunciaron sobre esta operación. El Banco de España ya ofreció CCM a La Caixa, que rechazó la fusión.

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Las discrepancias entre las direcciones de ambas cajas aumentan al acercarse el momento de valorar la entidad. La CAM en 2009 declaró una morosidad del 4,5%. Un año después la elevó a 8,7%. La entidad alicantina elevó sus saneamientos a costa de reducir de golpe su capital, hasta cerca del 4%. En Asturias se encendieron las alarmas: la CAM podría terminar hundiendo a toda la fusión, el Banco Base. Para protegerse, pide una depreciación de sus activos (restando valor a los dañados) de manera que no represente el 40% de Banco Base sino el 27%. Cajastur pasaría de tener el 40% a cerca del 50%, es decir, el control. Estos porcentajes chocan con el tamaño de las entidades: los activos de la CAM suman 75.000 millones y los de Cajastur (incluyendo la absorbida CCM), 42.000 millones. Algo no cuadra.

La entidad alicantina defiende a capa y espada el 40% de peso en la fusión. Pide que una vez esté cerrado el acuerdo por completo se encargue una due diligence independiente para decidir si hay que hacer cambios. Cajastur exige los cambios antes o amenaza con romper el acuerdo.

La CAM ve otros motivos en este conflicto. El problema, aseguran, reside en el acuerdo que garantiza a Manuel Menéndez el puesto de consejero delegado por 12 años. Si el banco sale a Bolsa nadie puede garantizar ese plazo. Por eso, dicen, Cajastur prefiere acudir al FROB para cubrir sus necesidades de capitalización. Cajastur considera imposible cotizar y que sería "regalar la caja". Pese al conflicto, los consejeros generales de la CAM desmintieron haber roto la fusión. "Es una absoluta frivolidad que pone en riesgo el conjunto del sistema financiero español" y deja al Banco de España a los pies de los caballos, comentaron. Negaron discrepancias en estados financieros y aseguraron que "el proceso continua tal y como estaba planificado. No buscamos ningún socio", informa Rosa Biot.

Unnim -la fusión de Caixa Sabadell, Terrassa y Manlleu-ha iniciado contactos preliminares con Banca Cívica para una posible integración de ambos grupos para reforzar su capital básico, según confirmó ayer la entidad catalana. La caja, no obstante, aseguró que, además de esta posibilidad, negocia con otras entidades. La caja catalana planeaba captar alrededor de 350 millones entre sus clientes, pero el Banco de España elevó sus necesidades de capital en 568 millones para tener un capital básico del 10%, desde el 6,7% actual. Con esta estrategia evitaría la entrada de capital público, informa Lluis Pellicer.

El que no eludirá al Estado será CatalunyaCaixa. El Consejo de Administración decidió ayer acudir al fondo de rescate (FROB) para captar los 1.718 millones que necesita para recapitalizarse y alcanzar un capital básico del 10,4%, desde el 6,9% actual. Esta cifra supone elevar su capital en un 55%. La caja pretende que la inyección de capital público sea "temporal", puesto que a "medio plazo" pretende dar entrada a inversores privados. De momento, descarta la salida a Bolsa por "la fuerte penalización de la valoración de las entidades financieras". Para atraer al capital privado dará entrada de los empleados en su capital, emitirá deuda convertible en acciones entre sus clientes, incorporará inversores e incluso combinará negocios con otras entidades financieras. La entidad ya pidió 1.250 millones del FROB en una primera fase.

Novacaixagalicia, cuya deuda está al borde del bono basura, votó a favor de recapitalizarse con capital público durante, al menos, dos años. Según el Banco de España necesita 2.600 millones más (que se suman a los 1.162 que recibió en 2010) para alcanzar un core capital del 10%, informa María Fernández. Para no pedir tanto capital, espera vender activos por valor de entre 1.000 y 650 millones. Así necesitaría 1.600 millones.

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Sobre la firma

Íñigo de Barrón
Es corresponsal financiero de EL PAÍS y lleva casi dos décadas cubriendo la evolución del sistema bancario y las crisis que lo han transformado. Es autor de El hundimiento de la banca y en su cuenta de Twitter afirma que "saber de economía hace más fuertes a los ciudadanos". Antes trabajó en Expansión, Actualidad Económica, Europa Press y Deia.
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