López pide unidad contra el terrorismo y nuevos pasos a la izquierda 'abertzale'

El lehendakari, Patxi López, despidió el pasado año con la esperanza de que el presente 2011 escenifique la ansiada "paz ciudadana" que contribuya al progreso económico. Como camino hacia ambos objetivos reclamó la "suma de esfuerzos", ya que "no son tiempos de divisiones, ni de conflictos, ni de reyertas entre territorios o instituciones". Un llamamiento general que concretó en la izquierda abertzale, a la que demandó nuevos movimientos "en la buena dirección, lejos de cualquier cercanía con el terror".

López resumió en su tradicional mensaje televisado de fin de año los logros de un 2010 que definió como "mejor" que el anterior. Destacó la defensa de la democracia en la lucha contra ETA y la tolerancia cero "con cualquier tipo de connivencia con la violencia". No hizo mención a posibles comunicados de la banda, pero aseguró que si el entorno de Batasuna "se mueve" es porque se le ha hecho saber que "solo hay un camino" y afirmó que le gustaría que se produjeran nuevos avances.

El recuerdo a "todas" las víctimas marca el mensaje de fin de año

En aras a un entendimiento colectivo, el lehendakari quiso recordar durante su intervención a "todas" las víctimas del terrorismo, "sin excepción", con el convencimiento de que se acerca "el final de la pesadilla". Agradeció de forma específica la labor de quienes perdieron la vida en defensa de la "democracia y la libertad" y dedicó una mención especial a Jean-Serge Nérin, el gendarme asesinado en marzo por ETA. "Espero que en 2011 veamos fortalecerse una nueva Euskadi sin miedo a los chantajes ni al terrorismo", deseó, antes de abogar por recorrer "juntos" ese camino.

López situó en la economía su otro objetivo "prioritario", consciente de que la crisis lastra la percepción positiva de su gestión, más de un año y medio después de llegar a Ajuria Enea. También en esta materia abogó por el "compromiso colectivo" como receta. "La industria comienza a recuperarse, el turismo ha pegado un gran salto e incluso hemos empezado a crear nuevos empleos", destacó, con intención de infundir ánimos ante el incierto horizonte. Las claves, a su juicio, radican en "aumentar la dimensión, la productividad y la competitividad" de las empresas vascas.

"Salir al mundo a buscar nuevos mercados" requiere de esfuerzos en educación e innovación, destacó el lehendakari, que ratificó en su discurso de fin de año las apuestas estratégicas del Gobierno. Entre ellas citó la introducción del inglés y las nuevas tecnologías en las escuelas, la potenciación del papel investigador de las universidades y los parques tecnológicos, así como el fomento del emprendizaje. "Son las bases del progreso del futuro", insistió López, quien abogó por convertir Euskadi, "poco a poco y entre todos, en una gran metrópoli de talento".

La intervención permitió desgranar otros ejes del Ejecutivo socialista como la lucha contra la violencia de género. El nombre de Cristina Estébanez, la última vasca asesinada a manos de su ex pareja, fue otro de los que quiso rescatar el lehendakari durante su mensaje. Recordó igualmente los fallecimientos del sindicalista Marcelino Camacho y del cantante Xabier Lete, a quienes presentó como "símbolos de todos los que se han ido".

López no quiso finalizar su mensaje de fin de año sin una declaración de otros principios entre los que citó el "reparto" de las cotas de bienestar entre los más necesitados, el "freno a los especuladores" que atacan a las economías y la "lucha contra el cambio climático".