Jiménez gana entre los concejales de la capital y casi empata en diputados

Tomás Gómez y Trinidad Jiménez han comenzado a medir sus fuerzas. Como en un combate pugilístico se están tanteando antes de lanzar el ataque que acabe con el rival en la lona y el campeón como candidato socialista para medirse a Esperanza Aguirre (PP) por la presidencia de la Comunidad de Madrid.

A falta de conocer la opinión de los cerca de 20.000 militantes socialistas, una foto fija entre los representantes del Partido Socialista de Madrid (PSM) en el Ayuntamiento de Madrid y en la Asamblea regional revela que las fuerzas están repartidas. Aunque Jiménez reúne más apoyos entre los concejales del Consistorio de la capital y empata en filias entre los diputados regionales, Gómez controla el aparato. La mayoría de los secretarios generales locales le ha mostrado su apoyo al líder madrileño.

"Intervendrá la maquinaria del partido", dice un dirigente

"Hay presiones. Es un juego de poder. Muchos cambiarán de bando"

Todos suspiran porque esta situación sirva para revitalizar el partido

"Los cargos intermedios los controla Tomás Gómez. Ellos apuestan por su secretario general, pero en este proceso intervendrá la maquinaria del partido, tanto la federal como la regional, y habrá distorsiones", asegura un dirigente socialista crítico con Gómez.

En el Ayuntamiento de Madrid, 12 de los 18 ediles socialistas han expresado su aval a la actual ministra de Sanidad. Frente a ellos está el portavoz socialista municipal, David Lucas, que encabeza una plataforma en favor de Jiménez. En este grupo también figuran concejales como Pedro Zerolo, Ángeles Álvarez y Óscar Iglesias.

Entre los cinco defensores de Gómez se encuentran las concejales Noelia Martínez (de la agrupación de Latina) o Ana de Sande (Usera). El concejal Manuel García-Hierro (con bastante influencia en los distritos de Villaverde y Vallecas) aún no ha decidido a quién mostrará su apoyo. García-Hierro fue uno de los rivales de Tomás Gómez en las primarias para elegir secretario general en el congreso ordinario del PSM de 2008. Pero no logró reunir los avales necesarios para concurrir a las elecciones internas.

El reparto de fuerzas entre los diputados de la Asamblea de Madrid entre los dos contendientes está bastante igualado. De los 42 parlamentarios regionales, unos 22 apoyarán a Tomás Gómez en unas elecciones primarias. Otro grupo de 18 diputados defendería una candidatura encabezada por Trinidad Jiménez. Además, hay un par de diputados indecisos aunque parecen más próximos al entorno de la ministra. Entre los diputados que muestran su apoyo al secretario general del PSM destaca la portavoz del grupo parlamentario socialista Maru Menéndez o el vicepresidente del grupo José Cepeda.La diputada Rosa Alcalá también apoya al secretario general del PSM. Se enfrentó en unas primarias a Tomás Gómez en 1999 para dilucidar quién sería el aspirante a la alcaldía de Parla.

Entre los parlamentarios que se decantan por la ministra de Sanidad se encuentran Óscar Blanco, Javier Gómez y César Giner, miembros del grupo Nuevo Socialismo, crítico con Gómez. También apoyan a Trinidad Jiménez los diputados Ruth Porta y Andrés Rojo, que gozaron de mayor protagonismo en la ejecutiva del anterior secretario general del partido Rafael Simancas.

Hay un pequeño grupo de parlamentarios que dicen con la boca pequeña apoyar a Gómez o Jiménez, aunque reconocen en privado que dejan abierta la posibilidad de cambiar de opinión. Lo cierto es que a pesar de las vacaciones y de que muchos de los cargos están fuera de Madrid el partido socialista está que arde.

Algunos dirigentes han regresado a toda prisa de sus vacaciones para tratar de convencer a los militantes sobre los que tienen alguna influencia. Los cruces de llamadas y mensajes telefónicos son continuos. Un concejal del Ayuntamiento de Madrid asegura que ha recibido SMS de los dos bandos reclamándole su apoyo para las primarias. "Hay presiones. En el fondo es un juego de poder. Hay muchos que dicen que apoyan a Tomás porque les ha ofrecido algún cargo. Pero eso puede cambiar", reconoce un destacado dirigente madrileño.

La dirección del PSM la controla Gómez. La comisión ejecutiva regional, el principal órgano de poder del partido, está compuesta por 40 cargos políticos, de los cuales unos 25 son fieles al líder socialista. El resto ha tomado partido por la ex candidata a la alcaldía de Madrid.

Entre los principales alcaldes socialistas de la región también se ha producido una fractura. Mientras que hace unos meses los alcaldes del sur formaban un frente inquebrantable contra Esperanza Aguirre, ahora están divididos por la candidatura. Diversas fuentes del PSM colocan a los alcaldes de Getafe, Leganés, Collado-Villalba, Fuenlabrada y Coslada como defensores de Jiménez. Mientras que Gómez cuenta con el apoyo de los regidores de Alcorcón, Parla, Pinto y Aranjuez.

Según las mismas fuentes, el secretario general del PSM ha trabajado para lograr el aval de los líderes locales del partido en los pequeños municipios de la región, pero ha dejado algo olvidadas las agrupaciones de la capital. En el entorno de Gómez recuerdan, sin embargo, su actividad en las asambleas vecinales por todos los distritos de Madrid.

Hay quien piensa que todo el revuelo por la candidatura para disputar la presidencia de la Comunidad de Madrid a Esperanza Aguirre puede resultar beneficioso para el partido socialista. "Si Gómez resulta vencedor de este pulso frente a Rodríguez Zapatero, saldrá con mejor grado de valoración y de conocimiento", sentencia un miembro de la ejecutiva regional del PSM.

Lo que esperan unos y otros es que la situación sirva para revitalizar a la lánguida federación socialista. "Esta situación ha provocado que Gómez haya ganado apoyo entre el primer nivel de la militancia donde era menos conocido", añade un destacado miembro de la ejecutiva regional.

Todos intentan mostrar sus activos. "Gómez ha conseguido unificar el partido. Nunca antes estaba tan unido", cuenta el diputado José Cepeda, próximo a Gómez. "Unidad, proyecto y trabajo", agrega Miguel Antonio Carmona, miembro de la ejecutiva regional. Los críticos, claro, lo ven diferente: "Ha fracasado, tiene que dejar paso a otros", dice un dirigente socialista que acusa a Gómez de tomar represalias contra los que le cuestionan.