Los nacionalistas piden al presidente que se atreva con medidas impopulares

El hallazgo de un común denominador en torno a las reformas que hay que llevar a cabo contra la crisis -cambiar el modelo productivo, recortar el gasto público, modificar el mercado laboral y "pensar" el modelo actual de pensiones- se presenta difícil para el Gobierno. El debate de ayer ofreció dos clases de recetas muy alejadas una de la otra. La derecha nacionalista y regionalista instó a Zapatero a acometer "medidas impopulares" pese al desgaste electoral que ello supondría. La izquierda, por el contrario, le advirtió que no estará dispuesta a apoyar una "cirugía de guerra" ni aumentos. La respuesta de Zapatero fue respetuosa y con ganas de buscar el encuentro. Sólo endureció el tono con ERC. A Zapatero le enojó sobremanera que su portavoz, Joan Ridao, calificara de bonapartista su forma de gobernar. Así fueron las intervenciones de los Grupos.

- CiU. "Cuidado con la paz social". El portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, jugaba en este debate con cierta ventaja porque conocía en parte lo que el presidente iba a plantear. Éste se lo contó en una charla telefónica el pasado fin de semana. El buen clima entre ambos se nota, pero no por ello éste dejó de plantear sus medidas. Duran reavivó las propuestas que ha defendido en los últimos meses y que el Gobierno no ha aceptado, como reducir temporalmente las cotizaciones de las empresas con menos de diez trabajadores que mantengan el empleo en los próximos dos años; disminuir el horario laboral para evitar que las empresas cierren, con una subvención del Estado que complemente los sueldos o noaumentar el IVA en algunos sectores y reducirlo en otros.

La predisposición de CiU para pactar es evidente pero avisó: "Debemos hacer los deberes con mucho sacrificio... Que no nos obsesione la paz social porque si ésta nos lleva a la ruina, no habrá paz social. Hagamos lo que tengamos que hacer, juntos, cuanto antes". Duran plantea reformas en el mercado de trabajo y en las pensiones y adelantó que aprobará el plan de austeridad con el recorte de 50.000 millones de euros que ha previsto el Gobierno. Zapatero le reconoció su "coherencia", ya que Duran insiste en la necesidad de un pacto de Estado desde que empezó la crisis.

- PNV. "El peligro de ser Grecia II". Los peneuvistas describieron un Zapatero "vacilante" ante "las reformas necesarias". Su portavoz, Josu Erkoreka, advirtió del peligro de que España se convierta en una "Grecia II" y Europa "descubra que están los deberes sin hacer y las reformas sin abordar". "Las medidas serán duras, serán antipáticas, probablemente impopulares, pero es usted quien debe poner el cascabel al gato. Si lo hace, y nos parecen razonables, tendrá el apoyo del PNV". Se refería Erkoreka al mercado de trabajo, al sistema de pensiones y a la estructura del gasto público. Zapatero le agradeció todo: tanto la oferta de pacto como las "descalificaciones".

- ERC. "Atrincherado en la inmovilidad". "Estamos en la crisis sobre la crisis ya que ustedes no han tomado ninguna medida estructural. Usted viene aquí con la resignación autocomplaciente, agazapado, atrincherado en esa inmovilidad que tanto le agrada". Éste fue el tono del discurso de su portavoz, Joan Ridao, con alusiones a las carreras matinales del presidente en La Moncloa o los retiros en Doñana que molestaron claramente a Zapatero. Pese a las descalificaciones (también aludió a su "bonapartismo"), el portavoz republicano sí se mostró dispuesto al diálogo en todos los terrenos que el Gobierno ha marcado. Ahora bien, estima excesivamente duras las consecuencias que tendrá la reducción del gasto público para llegar al 3% de déficit en 2013.

- IU-ICV. "Mejor la medicina social". Con Gaspar Llamazares, de Izquierda Unida, se hizo nítida la línea divisoria entre las fuerzas políticas anteriores, con matices en ERC, y la izquierda. "Usted no puede venir aquí con un plan de cirugía del sector público; un plan de cirugía que no tiene todo el apoyo de la Cámara; ni siquiera de los que pueden ser cirujanos de guerra", le espetó al presidente. En contraste, Llamazares propone "la medicina social", aunque en los últimos tiempos "el Gobierno propone medidas que desconciertan a la izquierda y a los sectores progresistas". Ni para alargar la edad laboral ni para aumentar el tiempo de cómputo para cobrar la pensión "contará con el apoyo de IU", advirtió.

- BNG. "Política social". El portavoz del Bloque, Francisco Jorquera, continuó la línea de exigir al Gobierno "una política social ante la crisis". Y lanzó sus propuestas: hacer del ICO una auténtica banca pública para restaurar el crédito a las pequeñas y medianas empresas y una política industrial para Galicia. Con estos mimbres, el BNG pactará. Zapatero le agradeció la respuesta.

- Coalición Canaria. "Que PP y PSOE se entiendan".

Aunque Ana Oramas, la portavoz de CC, no da un cheque en blanco al Gobierno, sí está dispuesta a pactar y pide tanto al PP como al Ejecutivo que se pongan de acuerdo. "Si no se entienden, nadie les entenderá".

- UPyD. "Sólo queda convocar elecciones". Rosa Díez, que tildó el discurso de Zapatero como el de "un tecnócrata preocupado porque le renueven el contrato", atribuyó a PP y al PSOE "un pacto para que nada cambie", en relación a la España de las autonomías en la que cada partido conserva su poder territorial. A juicio de Díez, sólo queda "convocar elecciones".

- Nafarroa Bai. "El pacto no es imprescindible". Un pacto de Estado es deseable pero "no imprescindible", señaló Uxue Barcos.