Imputado un marroquí en Alemania por el 11-S

En lo que hasta la fecha es el más completo recuento por parte de las autoridades alemanas de cómo un grupo islamista en Hamburgo preparó los ataques a la Torres Gemelas y al Pentágono, el fiscal general de este país, Kay Nehm, detalló ayer los motivos para inculpar a Mounir el Motassadek, marroquí de 28 años, actualmente detenido, de pertenecer a una asociación terrorista y ser cómplice en el asesinato de más de 3.000 personas el 11 de septiembre del año pasado. A uno de los pilotos suicidas, Marwan al Shehhi, ya en la primavera de 2000 se le escuchó decir, en una biblioteca alemana, que iba a haber 'miles de muertos en Estados Unidos'.

Dirigida por Mohamed Atta, uno de los pilotos suicidas, esta célula terrorista de Hamburgo maduró, 'a más tardar en octubre de 1999', la decisión de preparar algún ataque con aviones en EE UU.

'Para acordar los detalles de los atentados con los responsables de la red internacional', Mohamed Atta, Marwan al Shehhi, Ziad Jarrah (otro de los pilotos suicidas) y Ramzi Bin al Shibh (integrante de la célula) viajaron a Afganistán entre noviembre de 1999 y la primavera de 2000. Antes de volver, también Mounir el Motassadek y otro de los integrantes del grupo, Zacarias Essabar, asistieron durante tres meses a cursos para combatientes islámicos en ese país. Luego, tras haber sacado pasaportes nuevos, los futuros pilotos suicidas viajaron a Estados Unidos, donde tomaron clases de aviación.

Zacarías Moussaoui, francés de origen marroquí, detenido en EE UU un mes antes de los atentados por su actitud sospechosa en una escuela de aviación, es el único presunto terrorista que aguarda juicio por el 11 de septiembre en Estados Unidos. Desde ayer, el segundo formalmente inculpado por las autoridades está en Alemania. Mounir el Motassadek había sido detenido en Hamburgo en noviembre pasado.