Sadam Husein: 'No conseguiréis derribarme jamás. ¡Jamás!'

'No conseguiréis derribarme jamás. ¡Jamás!'. Esa advertencia, pronunciada ayer por el presidente de Irak, Sadam Husein, estaba dirigida a 'todos los tiranos maléficos y opresores del mundo'. Es decir, ante todo a EE UU, que parece determinado a derrocarlo, incluso militarmente, con la ayuda de sus aliados en la lucha antiterrorista.

El discurso de Sadam Husein, retransmitido por todas las cadenas de radio y televisión del país, conmemoraba el 34º aniversario de la revolución que llevó al poder a su partido Baaz, tras un golpe de Estado, el 17 de julio de 1968. Los iraquíes deben prepararse para luchar por la 'independencia y la libertad', afirmó el presidente iraquí, de 65 años, que dirige el país desde 1979.

Irak ha sido incluido por EE UU en su eje del mal, que reúne a países que apoyan el terrorismo. Washington acusa al régimen de Bagdad de desarrollar armas de destrucción masiva, después de que expertos de la ONU abandonaran el país a finales de 1998, ante su negativa a cooperar, siete años después de la Guerra del Golfo.

Retomando ayer la retórica del Bien y el Mal que preside a los enfrentamientos verbales entre Irak y EE UU, Sadam Husein pidió a Dios que proteja su país 'contra los planes del diablo'.

'Simpatizantes de Al Qaeda atacarían a los norteamericanos si Irak fuera atacado. Habría alguna reacción, sin duda', sostuvo también el clérigo musulmán británico Abu Hamza Al Masri, quien estaría vinculado a la red de Osama Bin Laden, según Washington.

Amenaza interior

La amenaza para el presidente iraquí no viene sólo del exterior. Llamó a combatir a los 'lobos e intrusos, que tienen apoyos dentro de los palacios del poder', y tratan de minar el régimen desde el interior. Sesenta antiguos oficiales de las Fuerzas Armadas iraquíes, actualmente en exilio, se reunieron en Londres el pasado fin de semana. Formaron un comité de 15 miembros para estudiar las posibilidades de derrocar a Sadam Husein y coordinar la acción tanto desde fuera como dentro de Irak. 'Irak saldrá siempre vencedor', reiteró, sin embargo, Sadam Husein, cuyo optimismo llegó hasta pronosticar que 'el pueblo de Palestina también conseguirá la victoria'.

'Hay maneras distintas' de enfrentarnos al problema de las armas de destrucción masiva, 'pero tenemos que hacerlo', comentó ayer el primer ministro británico, Tony Blair. 'Debemos actuar de acuerdo con las leyes internacionales'. Eso, según afirmó, 'no significa necesariamente que haya una nueva resolución de la ONU', previa a una acción militar contra Irak.

El ex presidente iraní Alí Akbar Hachemi Rafsanyani, aseguró, por su parte: 'Tenemos que estar preparados para una nueva agresión del enemigo y responderemos a ese ataque en el corazón mismo del territorio del enemigo'. Irán es otro de los países a los que Estados Unidos ha clasificado dentro del eje del mal.