_
_
_
_

Los habitantes de Kabul huyen en masa de la capital por temor a un ataque

'Ya tenemos bastante miseria, para que encima nos tiren misiles'

La atmósfera era pesada y tensa ayer en Kabul, la capital afgana, donde todos esperaban un ataque colosal de EE UU. El temor de represalias se acentuaba con cada nueva acusación de ese país contra Osama Bin Laden, el islamista de origen saudí refugiado en Afganistán, como principal sospechoso de los atentados contra Nueva York y Washington. La agencia Reuters citaba a residentes en Kabul que habían visto a gente cavando zanjas a las afueras de la ciudad y preparando fortificaciones. La noche anterior, los talibán lanzaron un llamamiento a EE UU para que no les provoque 'más miseria'.

Más información
El monstruo se vuelve contra Washington
Pakistán estudiará ceder su espacio aéreo a EE UU en las acciones contra Afganistán
Detenida una periodista británica en Afganistán

Con la salida de la mayoría de los occidentales de Afganistán, los ocho cooperantes de la ONG alemana Shelter Now International detenidos desde hace cinco semanas por predicar el cristianismo, están a punto de convertirse en los últimos extranjeros de Kabul. Los tres diplomáticos -un estadounidense, un australiano y un alemán- desplazados allí para asistir a sus ciudadanos encarcelados, así como las familias de las dos jóvenes estadounidenses detenidas, abandonaron la capital afgana ayer.

'No me agrada irme. Es desafortunado, pero se debe a las circunstancias', manifestó el representante alemán, Helmut Landes. 'El abogado elegido por los prisioneros estará aquí el sábado; estaremos en contacto constante con él desde Islamabad y los talibán son responsables de la seguridad de nuestros ciudadanos', añadió antes de subir a uno de los tres aviones de la ONU que esperaban sobre la pista del aeropuerto. El personal extranjero de Naciones Unidas también ha abandonado Kabul, como la mayoría de trabajadores de organizaciones no gubernamentales. De momento, el Comité Internacional de la Cruz Roja, aunque ha reducido sus actividades, ha decidido quedarse; sólo 12 de sus 70 trabajadores extranjeros han salido de Afganistán.

La población de Kabul se teme lo peor. 'Por supuesto que tenemos miedo. Si hay pruebas de que Bin Laden y los talibán están implicados, Estados Unidos va a reaccionar con misiles y bombas', asegura Inayatullah, un farmacéutico de la capital. El paso a baja altitud de un cazabombardero de las fuerzas talibán lleva a todo el mundo a echarse a la calle con gran nerviosismo. 'He pensado que podía tratarse de una bomba', sonríe Zailmai. 'Ya tenemos bastante miseria, para encima convertirnos en objetivo de misiles', añade.

La mayoría de los interrogados critica los atentados contra territorio estadounidense. No se ha producido ninguna manifestación de alegría o de apoyo entre la población afgana. El apoyo popular del que se beneficiaron inicialmente los combatientes árabes y su símbolo, Osama Bin Laden, ha desaparecido. 'La gente está enfadada porque debido a la presencia de estos invitados, nos arriesgamos a un ataque', afirma Mohamed Haroun, que tiene una perfumería.

[Los árabes-afganos, como se conoce a todos los militantes musulmanes venidos a apoyar la guerra contra la antigua URSS, están abandonando Afganistán y ayer ya casi no quedaba ninguno en la capital, informa Reuters].

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_