_
_
_
_
Fin de semana 'indignado'

El Congreso de los indignados

Los manifestantes improvisaron recorridos y llegaron hasta las Cortes sin causar incidentes - Ya hay otra cita el 19 de octubre

Inés Santaeulalia
El itinerario de la marcha,. que comenzó a las seis y media de la tarde, era de Atocha a Sol.
El itinerario de la marcha,. que comenzó a las seis y media de la tarde, era de Atocha a Sol.EL PAÍS

La Puerta del Sol dejó este fin de semana de ser el único epicentro del movimiento 15-M. Ya el sábado, ante las columnas de gente que llegaron desde todos los puntos de España, el kilómetro cero se quedó pequeño y comenzó la expansión. Si la noche del sábado el campamento se instaló en el Paseo del Prado, a media noche de ayer los indignados debatían si pasar la noche frente al Congreso de los Diputados, donde permanecían concentrados y retenidos por un amplio cordón policial.

La multitudinaria manifestación -según los cálculos de este periódico pudieron concentrarse unas 35.000 personas-, entre Atocha y la Puerta del Sol, no terminó en una asamblea en la plaza, como estaba previsto. Primero decenas, y luego cientos de personas trasladaron la protesta hasta las Cortes. Un perímetro de seguridad rodeaba al edificio e impedía el acceso a la Carrera de San Jerónimo. Toda la zona estaba vallada y flanqueada por decenas de policías, pero los indignados tomaron asiento. Retaban a la policía a ver quién aguantaba más.

Más información
Cuando Sol despierta a ritmo de rap
"No es una crisis, es que ya no te quiero"
Una chabola enciende Orcasitas
Techo y pan y vino
Asamblea de indignados de toda España
El 15-M peregrina a Bruselas
Una indignada 'se cuela' en el Congreso para entregar las propuestas del 15-M
Pantalón de pinzas, abre la muralla
La reconquista de Sol

Este fue el destino final de los manifestantes, que el sábado habían instalado el campamento en el Paseo del Prado. Los grupos de trabajo también salieron de Sol y se trasladaron al Parque del Retiro. Durante todo el día, mientras unos debatían sobre el futuro del 15-M en el parque, otros descansaban en las tiendas de campaña, pero a las seis y media de la tarde todos se pusieron de acuerdo y se encontraron en la Glorieta de Atocha para la manifestación.

Cuando los indignados se reúnen en asamblea, cuando paralizan un desahucio o, como en este caso, cuando se manifiestan por las calles o protestan frente al Congreso siempre hay un miembro de la organización velando porque la situación no se desmadre. Intentan pasar desapercibidos, procuran no identificarse. Este fin de semana, ante la cantidad de gente y la tendencia expansiva, han tenido que multiplicarse. Son los guardianes del movimiento: la comisión de respeto del 15-M, y lograron que el fin de semana acabase sin incidentes relevantes.

Eso a pesar de que el recorrido hasta Sol era un campo de minas para los indignados, que no dejaron que se les escapara ni una. A un lado el Ministerio de Sanidad, parada y pitada general, a otro el Ayuntamiento de Madrid, enfrente el Banco de España y, por el camino, sucursales de bancos y edificios oficiales. Una protesta en cada esquina hasta que llegaron a los alrededores del Congreso. Pasadas las doce, seguía uniéndose gente y parecía que la noche iba para largo. Algunos se acercaban a Sol para cenar en la carpa de alimentación: ensalada y macarrones, y volvían a su nuevo objetivo. Venían para un fin de semana y, aunque muchos se fueron ayer, el programa de actividades de esta jornada es muy completo. Hay suficiente comida en las despensas y las carpas se consolidan. Hoy se quedan, mañana quién sabe.

La cabeza de la manifestación del 15-M con una pancarta en la que podía leerse: "No es una crisis, es que ya no te quiero".
La cabeza de la manifestación del 15-M con una pancarta en la que podía leerse: "No es una crisis, es que ya no te quiero".AFP

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Inés Santaeulalia
Es la jefa de la oficina de EL PAÍS US, antes fue responsable en Colombia, Venezuela y la región andina. Comenzó su carrera en el periódico en el año 2011 en México, desde donde formó parte del equipo que fundó EL PAÍS América. En Madrid ha trabajado para las secciones de Nacional, Internacional y como portadista de la web.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_