Eva Longoria no vivirá en el Estados Unidos de Donald Trump: “Si cumple sus promesas, va a ser un lugar aterrador”
La actriz ha decidido residir en España y México y afirma sentir “ansiedad y tristeza” por quienes no pueden marcharse de “este país distópico”: “Lo chocante no es que haya ganado. Es que un criminal convicto que vomita tanto odio pueda ostentar el más alto cargo”
Eva Longoria se va. La actriz texana, nacida en Corpus Christi hace 49 años, se planta frente a las nuevas políticas que traerá el recién elegido presidente, Donald Trump, y ha decidido que vivirá la mayor parte del tiempo fuera de Estados Unidos. Así lo ha explicado en una larga entrevista concedida a la revista Marie Claire, a la que acompaña una completa sesión de fotos que se realizó en Madrid. Es en la capital española, junto con México, donde Longoria pasa la mayor parte de su tiempo, junto a su marido, el empresario Pepe Bastón, y su hijo, Santiago.
La protagonista de Mujeres desesperadas ya lleva meses viviendo a caballo entre Los Ángeles (cada vez menos) y México y España. Sin embargo, ahora esa decisión parece ser mucho más firme y meditada, y con un componente mucho más político. Así lo hace ver en la charla, donde demuestra cómo su activismo no es compatible con la visión de su país que tiene Trump. La conversación con la revista tiene lugar unas semanas antes de las elecciones. En ella Longoria —un personaje público imparable, directora, guionista, actriz, activista, filántropa, con docenas de proyectos en marcha, a la que el diario The Washington Post calificó como “una agente de poder política” por su trabajo “feroz y productivo” para movilizar a los latinos y a las mujeres en favor de los demócratas— cuenta cómo tuvo que meterse en la cama cuando Trump ganó en 2016. “Nunca había estado deprimida, en mi vida”, recuerda. “Era como: ‘¿Realmente importa mi voto? ¿Estoy marcando de verdad la diferencia?”, explica. “En el fondo de mi alma, creía que de verdad ganaba el mejor. Y entonces pasó eso, y me dije: ‘Oh, espera. La mejor persona no gana”.
Reconoce la actriz que la mayor parte de su trabajo está en España y México, en ocasiones en más países de Europa y de América Latina, y que ya no rueda tanto en Hollywood, al que ya hace años calificó de “sistema patriarcal”, pero que tampoco lo echa de menos. “He pasado aquí toda mi vida adulta”, explica sobre Los Ángeles, ciudad a la que se mudó con poco más de 20 años para perseguir una carrera en la industria. “Pero incluso antes [de la pandemia], ya estaba cambiando. El ambiente era distinto. Y entonces llegó el covid y la empujó hasta el límite. Ya sea por la falta de vivienda o por los [altos] impuestos —no es que quiera echar mierda sobre California—, siento que este capítulo de mi vida ya ha terminado”. En cualquier caso, se reconoce “privilegiada” de tener esa oportunidad: “Puedo escaparme, irme a algún sitio. La mayor parte de los estadounidenses no tienen tanta suerte. Van a quedarse atrapados en este país distópico, y mi ansiedad y tristeza es por ellos”.
Para esta campaña de 2024, la texana (cuya familia lleva nueve generaciones viviendo en el Estado sureño, cada vez más republicano) acudió a la Convención Demócrata de Chicago el pasado verano, y estuvo en mítines del combo formado por Kamala Harris y Tim Walz. Esta vez, el resultado de las elecciones le ha impactado de manera poco distinta, relata a la revista dos días después del triunfo de Trump: “Lo chocante no es que haya ganado. Es que un criminal convicto que vomita tanto odio pueda ostentar el más alto cargo”. En la línea de lo que ya afirmó Harris en su primer discurso tras las elecciones, Longoria afirma: “Me gustaría pensar que nuestra lucha continúa”. Entonces asegura que su país natal “da miedo”: “Si cumple sus promesas, va a ser un lugar aterrador”, dice sobre Trump.
Longoria lleva un tiempo pasando largas temporadas fuera de su país natal. A principios de 2023 se compró una mansión en Marbella, localidad de la costa malagueña conocida por su buen clima, sus comercios de lujo y por ser refugio de la jet set global desde hace medio siglo. Hace unos meses puso a la venta su casa de Los Ángeles, situada en Beverly Hills, y que decidió vivir largas temporadas en España. Contaba a este periódico, en una entrevista el pasado junio, que con su marido y con su hijo Santi pasaban la mayor parte del tiempo en el país natal de Bastón. “Nació en Los Ángeles”, explicaba sobre el pequeño, “pero vivimos en México”, afirmaba, contando que el verano era para la ciudad malagueña. “Adoro este país. Conocí Marbella hace ya 20 años y fue amor a primera vista. Empecé a pensar en comprar una casa aquí hace cinco años y he estado buscándola todo este tiempo”, relataba la actriz a la revista ¡Hola! hace unos meses. “Cuando estoy en Los Ángeles, siempre estoy trabajando y muy ocupada”, “asocio España con vacaciones, cuando estoy aquí no tengo horarios. Voy a la playa con mi hijo... Es un modo de vida más lento, pero muy pleno”.