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ERC intenta evitar que Illa opte a la investidura iniciando contactos para un Gobierno independentista

Aragonès quiere un Ejecutivo “amplio”, pero Junts y En Comú Podem se declaran incompatibles

Pere Aragonès, este lunes en Barcelona. En vídeo, declaraciones de Aragonès este lunes en RAC-1.Vídeo: ALBERT GARCÍA / EPV

Pere Aragonès (ERC) tiene prisa por formar un Gobierno independentista en Cataluña y se ha puesto manos a la obra. Lo que busca es adelantarse al intento del socialista Salvador Illa, vencedor en votos en las elecciones del domingo, de optar a la investidura. “En los próximos días, hoy o esta semana, tenemos que poder avanzar bastante en las conversaciones. El 12 de marzo es la fecha límite para la conformación del nuevo Parlament, pero espero que el acuerdo sea mucho antes”, ha asegurado Aragonès este lunes. El republicano emplaza a los partidos independentistas y a En Comú Podem a sentarse a negociar lo antes posible para formar un Gobierno “amplio” a favor de la autodeterminación y la amnistía de los condenados por el procés. Sin embargo, Junts no ve con buenos ojos la incorporación de los comunes y estos a su vez no quieren gobernar con el partido de Carles Puigdemont. “No podemos compartir Govern con Junts per Catalunya y Aragonès lo sabe”, ha remarcado esta mañana Jéssica Albiach, líder de En Comú Podem. Jordi Sànchez, secretario general de Junts, ha defendido en una rueda de prensa que su apuesta es por un Ejecutivo solo con los anticapitalistas y republicanos.

Por primera vez ERC lidera el espacio independentista en el Parlament y quiere acelerar las negociaciones para formar Gobierno. Los republicanos lograron finalmente ser los ganadores en el bloque independentista, al imponerse por casi 34.000 votos a Junts. El PSC y ERC empataron a 33 escaños con el 100% de los votos. “Hablé con Laura Borràs, Dolors Sabater y Jéssica Albiach. Y también hablé con Salvador Illa. Lo conseguiremos”, ha asegurado Aragonès. “En campaña dijimos que queríamos un Gobierno amplio y es lo que haremos; dijimos que no queríamos gobernar con el PSC porque somos como agua y aceite, y es lo que haremos”. Sànchez ha hecho un llamamiento a Aragonès a que les haga llegar “cuál es su visión de la legislatura y cómo tiene que construir el independentismo” para comenzar a abrir las negociaciones.

Por su parte, el candidato del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), vencedor en las elecciones del 14-F en número de votos, Salvador Illa, ha insistido este lunes en una entrevista en la cadena SER en su determinación de presentar su candidatura e intentar abrir una nueva etapa en Cataluña: “Voy a intentar andar un nuevo camino”. Se trata de una posibilidad que no depende completamente de Illa, pues la decisión de proponerle ante el pleno es del futuro presidente de la Cámara que primero decide si tiene los apoyos necesarios para convocar una sesión de investidura. La rapidez de los independentistas para conformar una mayoría también neutralizaría los pasos de Illa y su deseo de visibilizar en un intento de investidura que hay posibilidades más allá del soberanismo.

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Esquerra y Junts per Catalunya suman ahora 65 escaños en el Parlament, tres por debajo de la mayoría absoluta. Borràs ha confirmado que, tras los resultados, llamó a Aragonès y Sabater para “ponerse a trabajar hoy mismo” pero aún no hay una reunión programada. “Lo primero que hay que hacer es saber cómo cada formación ha leído el resultado de las urnas”, ha defendido posteriormente Sànchez. Junts no ve claro la participación de los comunes y Borràs ya había descartado esa vía en su apuesta por un Govern nítidamente independentista, en la que insistió este domingo.

Por su parte, el presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha reclamado en TV3 la unión con quienes están “a favor de la autodeterminación y la amnistía” y ha descartado un pacto con los socialistas catalanes: “Es imposible un Gobierno con el PSC. Somos antagónicos”, ha insistido Junqueras. Aragonès también ha aprovechado su entrevista en Rac1 para lanzar un emplazamiento al Gobierno central a trabajar en la mesa de diálogo creada el año pasado para abordar la cuestión catalana. Y ha pedido a los sectores independentistas más recelosos con esta iniciativa que no desechen la idea antes de tiempo. “No hay que pasar pantallas tan rápido”, ha dicho. Lo primero para Aragonès es intentar poner en marcha un Gobierno.

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Aragonès anunció tras el escrutinio que, pese a ser la segunda fuerza tras el PSC, intentará formar un Ejecutivo “amplio” y que para ello cuenta no solo con su actual socio sino también con la CUP y los comunes. Aragonès quiere ir más allá de la suma de 74 escaños que se alcanzaría con un acuerdo con los anticapitalistas y llegar a un total de 82 diputados (sumando los ocho de los comunes) “a favor del referéndum y de la amnistía”. La candidata de la CUP, Dolors Sabater, compartió esa idea de incluir también a Catalunya en Comú Podem e instó a todos a reunirse este mismo lunes para plantear un acuerdo programático. ERC defendió desde el inicio de la campaña ese frente amplio, que también incluía al PDeCAT, pero que finalmente no logró representación.

Albiach tiene ahora la presión del independentismo, de la que intenta zafarse. “No es el momento de frentes ni de bandos, sino de ir todos juntos, los progresistas y demócratas de la mano, de comenzar a dar soluciones a las crisis y, desde el diálogo, resolver este conflicto político”, dijo.

Los republicanos lograron finalmente ser los ganadores en el bloque independentista, al imponerse por casi 34.000 votos a Junts. La opción secesionista —incluido el PDeCAT, sin representación— se consolida entre la ciudadanía catalana que acudió a las urnas, al superar los resultados de los anteriores comicios autonómicos: 47,5% en 2017 y 47,8% en 2015. Eso sí, con menos votos: 1,3 millones contra los 2.078.000 sufragios de 2017. En escaños, los comicios de este domingo dejan una mayoría más reforzada, 74 diputados frente a los 70 de la legislatura que ahora se acaba. En votos, menos de un tercio del censo votó a partidos independentistas.

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