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Las estudiantes de Mauritania pintan para transformar su mundo

Un proyecto promueve la igualdad de oportunidades y la inclusión social a través del arte. La creación de murales por las chicas adolescentes en escuelas públicas de Nuadibú no solo ha logrado transformar el paisaje urbano, sino también a los estudiantes que participan

Mauritania - 13 may 2022 - 18:22CEST

El proyecto 'Art, Musée et École' es un programa artístico que promueven la igualdad de oportunidades y la inclusión social, acercando el arte a los centros educativos a través de actividades de participación donde los alumnos y alumnas puedan expresar y comunicar mediante la creatividad. Así lo han implementado en Mauritania, tal como se muestra en esta serie fotográfica cedida por los organizadores.

Se trata de una iniciativa del Museo Nacional de Nouakchott, que recibe apoyo del Ministerio de Educación del país africano y la Embajada de España en Mauritania. El proyecto surgió al constatar la ausencia de las artes visuales en el programa escolar, y fue el director general del Museo, Mamadou Hadya Kane, quien lanzó la idea de crear el proyecto 'El Museo va a la escuela', y confió al pintor Mansour Kebe la coordinación de la misión.

“Al principio pensé que la actividad era para niños pequeños, pero cuando entendí que la idea era pintar un gran mural en la pared, entonces participé con Daud para colorear nuestra escuela. Ahora, cada mañana, cuando llego al colegio y veo la pintura me da mucha alegría”, dice Moktar Ahmed, unos de los alumnos participantes.

Según Mansour Kebe, coordinador de la iniciativa, esta vez se ha contado con el ilustrador y artista español Daud (David de Echave) que se desplazó hasta la escuela pública Haye Madrid NDB en Nuadibú para llevar a cabo una creación colectiva. "Conocimos a Daud en Dakar y nos gustó su línea de trabajo. Además, descubrimos que trabaja mucho con niños, desarrollando métodos participativos, haciendo valer el arte y la creatividad como motor integrador. Y eso es justo lo que buscamos nosotros a través de este proyecto", explica.

Antes de abrir los botes de pintura, la animadora Fatoumata Tall, del proyecto 'Art, Musée et École' fue la encargada de coordinar unos talleres previos a la creación del mural, y donde los estudiantes reflexionaron en torno al valor de la mujer en la sociedad. En esas conversaciones también decidieron los elementos y los colores a representar en el mural, así como la frase “La mujer es un tesoro social”, escrita en árabe y francés y que después representarían en la parte central del mural.

“En las reuniones que hicimos antes de pintar el mural, estudiantes del primer ciclo de estudios secundarios que tienen entre 11 y 15 años, presentaron muchos dibujos y frases para el diseño del mural, y lo más difícil fue elegir entre tantas propuestas. El hecho de que pudieran decidir el mensaje y los dibujos generó entusiasmo y motivó mucho a las alumnas”, comenta Tall.

En el centro educativo aseveran que para ellos es una animación bastante inusual que nunca antes habíamos visto y en la que han participaron más de 60 estudiantes de primaria y de secundaria. "Presenciar el trabajo de un artista y participar de manera directa en la creación de esta pintura mural es un impacto que sin duda quedará grabado en la memoria de los estudiantes", comenta Mohamed Mahfoud, Issa, director de la escuela fundamental Haye Madrid NDB de Nouadibou.

“Estoy muy sorprendida de que un artista estuviera unos días con nosotros pintando los muros de mi escuela. Yo pinté con Daud y fue muy amable. Él sabe cómo hacer su trabajo. Ahora mis amigas me preguntan ¿qué significa estos dibujos? Y yo les explico el significado”, cuenta Feyrouse Ahmed, una de las alumnas involucradas.

“Uno de nuestros primeros objetivos con este proyecto fue acercar las artes plásticas a los jóvenes estudiantes de las escuelas públicas para mostrar la diversidad cultural de Mauritania y proporcionar a los alumnos los elementos necesarios para conocer nuestro pasado y comprender mejor nuestro presente y futuro. Al llenar este vacío, esperamos que el Ministerio de Educación Nacional vuelva a introducir la educación artística en el currículo escolar”, asegura Mansour Kebe.

"Ahora empezamos a darnos cuenta de la importancia del arte en general y, especialmente, de la pintura. Creo que debería ser una materia de igual valor que todas las demás. Al día de hoy no está incluida en el programa escolar y esperamos que pronto podamos incluir la enseñanza de las artes plásticas en la escuela", reflexiona Mohamed Mahfoud, Issa, director del colegio Haye Madrid NDB de Nouadibou.

Según Daud, artista invitado: “Lo importante de este tipo de intervenciones es el proceso creativo y no tanto el resultado final, para lograr una buena participación es fundamental que se identifiquen con la iconografía representada. Mi principal objetivo es que vivan la experiencia de expresarse a través de la pintura, pero de manera lúdica y divertida”.

"Pintar con estudiantes tan motivados es un regalo, especialmente las niñas y adolescentes estudiantes, porque, a pesar de las dificultades del contexto en el que viven, mantienen una fuerza y una actitud increíblemente positiva”, comenta Daud, que posa junto a algunas de las jóvenes estudiantes.

“Espero que Daud regrese de nuevo para hacer más murales en las paredes de nuestra escuela. Cada día hay mucha gente que se para delante del mural para tomar fotos, y eso hace que me sienta orgullosa de lo que hicimos”, pide Penda Ndonguo, una de las pequeñas artistas.

“Estas jóvenes estudiantes son una revolución social en sí mismas, por fin han logrado el derecho fundamental de poder ir a la escuela. Dan la sensación que traen toda la fuerza y el entusiasmo de las generaciones anteriores que no tuvieron la misma suerte”, reflexiona Daud.

“Es preferible que la pared a intervenir sea un muro exterior del recinto escolar, para que tenga más visibilidad y se haga más partícipe al barrio y a la comunidad. Una actividad de este tipo promueve la igualdad de oportunidades y evita el espíritu competitivo para favorecer la relación entre los jóvenes estudiantes y su entorno. Se genera un espacio neutral de participación, de confianza, de convivencia en donde se olvidan de sus diferencias. Es sorprendente la cohesión social que genera unos simples botes de pintura de colores", reflexiona Daud.

"En los años anteriores habíamos realizado la actividad en colegios de Nouakchott, pero en 2022 hemos apostado por llevar el proyecto a otras regiones como Rosso y Nouadhibou. Y en las siguientes etapas continuaremos en Kaedi, Selibabi y Atar. Nuestro deseo es llegar a todas las localidades de Mauritania", sueña el coordinador del proyecto, Mansour Kebe

"Ha sido una actividad muy positiva que ha impactado a toda la escuela, y ha logrado romper con la monotonía de las clases", añade Mohamed Mahfoud, Issa, director de la escuela Haye Madrid NDB de Nouadibou. "Anima a los estudiantes a interesarse por el arte, especialmente por la pintura. Además, aporta una imagen más cultural al aspecto de la escuela. Estamos muy agradecidos al proyecto y esperamos que vuelvan con nosotros para desarrollar más actividades".