Las facetas de una butaca

Juan Carlos De Marcos.

Las costuras del tapizado de esta butaca, ejecutadas a modo de caras facetadas de un poliedro, no son solo una decisión estética. También mejoran el confort del asiento. Esta cualidad de la ­butaca, más redondeada que estrictamente geométrica, da nombre además a la pieza: Soft Facet (faceta suave). Es una novedad de la firma holandesa Artifort y uno de los últimos diseños como dúo de Scholten & Baijings, el estudio de los diseñadores Stefan Scholten y Carole Baijings, que acaban de emprender recientemente caminos independientes. Esta bu...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Las costuras del tapizado de esta butaca, ejecutadas a modo de caras facetadas de un poliedro, no son solo una decisión estética. También mejoran el confort del asiento. Esta cualidad de la ­butaca, más redondeada que estrictamente geométrica, da nombre además a la pieza: Soft Facet (faceta suave). Es una novedad de la firma holandesa Artifort y uno de los últimos diseños como dúo de Scholten & Baijings, el estudio de los diseñadores Stefan Scholten y Carole Baijings, que acaban de emprender recientemente caminos independientes. Esta butaca es un buen ejemplo de las dos grandes cualidades que han caracterizado a la producción del estudio durante casi 20 años: su magnífico uso del color —ahí está la gama de tonos del asiento— y su gusto por los detalles, como el cinturón de piel que une las patas. A partir de 1.969 euros.

Sobre la firma

Más información

Archivado En