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Hailey Baldwin, la supermodelo social

"No somos animales en un zoo a los que observar", dice con 7,4 millones de seguidores en Instagram la exnovia de Justin Bieber

Hailey Baldwin se prepara para desfilar en Nueva York.Foto: reuters_live | Vídeo: ANGELA WEISS (AFP)

Es amiga de Kendall Jenner y Gigi Hadid, hija de Stephen Baldwin (y, por lo tanto, sobrina de Alec) y exnovia de Justin Bieber, pero Hailey Baldwin se está haciendo un nombre en la moda sin necesidad de hacer uso de ninguna de esas coletillas. Tras la última Semana de la Moda de Nueva York, donde ha desfilado para Prabal Gurung, Tommy Hilfiger o Jeremy Scott, entre otros, Baldwin ya es oficialmente una más en el circuito de las pasarelas internacionales. Y ahora vienen Londres, Milán y París. “Aún no sé qué desfiles voy a hacer en Europa, pero es cierto que Nueva York ha ido muy bien; con tiempo, paciencia y trabajo, todo llega”. Resulta curioso oír hablar en esos términos a una joven de 19 años que lleva apenas dos en una industria a la que llegó por accidente o, mejor dicho, por lesión; iba para bailarina cuando una vértebra rota la obligó a buscar plan b. Recién aterrizada en la capital británica, el jueves por la noche fue la estrella de un evento de la firma española Stradivarius, con la que se identifica porque “tiene un rollo muy joven y divertido”.

Con 7,4 millones de seguidores en Instagram, la americana forma parte del grupo de las llamadas “supermodelos sociales”; chicas que han hecho de la red social favorita de la moda su mejor herramienta de autopromoción. Pero se resiste a pensar que se lo deba todo a esta plataforma (“¿Estaríamos cualquiera de nosotros donde estamos sin las redes sociales? No lo sé. Yo quiero pensar que lo habría conseguido también sin ellas”), y asegura que en su vida y la de sus amigas hay un lado menos glamuroso del que nos dejan ver: “La gente cree que todo lo que hacemos se sale de lo normal, y realmente no es así. También somos personas, no figuras en un museo o animales en un zoo a los que observar”. El lado oscuro de esa fama labrada a golpe de “me gusta” son los comentarios, en ocasiones tan destructivos que su ex novio Justin Bieber llegó al extremo de cerrar su cuenta. “Hay que ignorarlos; no puedes dejar que las opiniones de gente que no te conoce influyan sobre lo que piensas de ti misma”, apunta.

Hailey Baldwin, en la fiesta de Londres.
Hailey Baldwin, en la fiesta de Londres.

Educada en la fe cristiana (“creo que Dios me puso en la vida por una razón”, asegura), Hailey es una de las personalidades que aparecen en una serie de vídeos producidos por la edición americana de Vogue para animar a votar en las próximas elecciones. Aunque una cosa es decirle que sí a Anna Wintour y otra muy distinta es hablar de política con la prensa: “Prefiero no tocar el tema, porque tengo la sensación de que a cualquier cosa que diga se le sacará punta. Pero sí creo que es importante que nuestra generación se involucre, porque solo hay ocasión de votar cada cuatro años”.

Descrita por la revista V como “la chica it definitiva” y tras firmar en marzo con la poderosa agencia IMG Models, la carrera de Baldwin está en plena explosión. Campañas de firmas como Guess, editoriales de moda en Vogue Italia y el lanzamiento en noviembre de su propia línea de cosméticos con la marca australiana ModelCO la han convertido en lo que en inglés llamarían 'the next big thing'. ¿Sueños por cumplir? “El desfile de Victoria's Secret, mi primera portada de Vogue y una campaña de Yves Saint Laurent”. El día que lo consiga, al menos siete millones de personas estarán mirando.

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