¿Cómo afectaría a la economía española una guerra en Ucrania?
España no depende del gas natural ruso, a diferencia de gran parte de Europa, pero se podría ver lastrada por un aumento de la inflación
Europa afronta uno de los conflictos internacionales más importantes de su historia reciente. El sonido de tambores de guerra en Ucrania todavía está presente y los mercados de todo el mundo observan cada movimiento político con lupa. Tanto Rusia como Ucrania son proveedores en Europa de recursos clave como gas natural, petróleo o cereales. En el aspecto energético, probablemente el más importante de todos, España tiene una gran ventaja de cara a un posible conflicto: no depende del gas natural que proviene de Rusia. A diferencia de Alemania, Hungría o los países bálticos, España importa su gas mediante grandes buques metaneros que lo transportan en estado líquido hasta alguna de las seis plantas regasificadoras que existen actualmente. Aun así, no podríamos evitar las consecuencias de una subida generalizada de los precios de energía y combustibles en toda Europa.
En otros aspectos, España está en peor posición. Nuestras importaciones de cereales dependen en gran medida de Ucrania: prácticamente la mitad del maíz que consumimos se importa de este país. Un parón en las exportaciones se traduciría inequívocamente en un aumento de los precios. El precedente lo encontramos en la invasión rusa de Crimea, cuando los precios de los cereales llegó a subir un 20%, según Toño Catón, director de Cultivos Herbáceos de Cooperativas Agro-alimentarias. Este escenario de inflación podría hacer especial mella en España. Una reducción de las compras de deuda y una subida de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE), castigarían a aquellas economías con más deuda pública sobre PIB. La de España es una de ellas. En el vídeo que acompaña a esta noticia puede ver el análisis de varios expertos sobre el impacto que podría tener en la economía española un conflicto en Ucrania.