Neymar termina la fiesta y regresa al festival

En Vallecas, contra el Rayo, a falta de tres minutos para el final del partido, Neymar vio la quinta tarjeta amarilla en lo que va de Liga. La sanción le impedía jugar contra el Eibar el pasado domingo y Luis Enrique decidió darle cinco días de fiesta. Con el permiso de su entrenador, se subió a un avión y marchó rumbo a Brasil. Faltó al entrenamiento de recuperación del lunes y el jueves se reincorporó al trabajo. “Soy el encargado de dar los permisos a mis jugadores. Neymar lleva una carga de minutos muy grande”, justificó Luis Enrique. Es el quinto futbolista con más tralla de la plantilla tras haber jugado 3.144 minutos, por detrás de Luis Suárez (3.720), Busquets (3.259), Mascherano (3.182) y Rakitic (3.167).

La temporada pasada, Neymar llegó a las cinco cartulinas amarillas en la misma época del año y también viajó a Brasil. En cualquier caso, este año no perdió el tiempo, de fiesta en fiesta aunque siempre sin esconderse. Vio el partido de Eibar con sus amigos en un yate, visitó la sede del Instituto que lleva su nombre, que financia la educación de 2.400 niños, se hizo un tatuaje nuevo en la pierna izquierda para pedirle a Dios que le proteja y participó activamente en la fiesta de cumpleaños de su hermana, Rafaella, donde bailó y cantó. De todo dejó huella en las redes sociales, claro. De vuelta se espera que siga haciendo lo que viene haciendo este curso: convertir en un festival futbolístico cada balón que toca. El equipo de trabajo de Luis Enrique está convencido que el paulista necesitaba un asueto, ahora que mira con lupa las cargas de trabajo acumuladas por sus futbolistas y quiere dosificar a sus jugadores para que lleguen a final de temporada lo más frescos posibles. Espera una buena: 12 partidos, 16 si el Barça llega a la final de la Champions League, el 28 de mayo. Y ayer perdió a Sandro por seis semanas, como consecuencia de una rotura muscular en el recto de la pierna izquierda.

Neymar dio un paso adelante en ausencia de Messi, que se rompió la rodilla el 26 de septiembre frente a Las Palmas y asumió responsabilidades. En dos meses sin La Pulga, marcó 11 de los 23 goles que lleva firmados esta temporada, casi la mitad (el 47,8%) y repartió siete de las 18 asistencias que acumula (38,8%). Razones de sobra para que el Barcelona y el jugador tengan muy claro que toca una mejora de contrato. “Las dos partes estamos de acuerdo. La idea es ampliar y mejorar el acuerdo. Así que a final de año nos sentaremos y lo firmaremos”, dicen fuentes de la directiva.

La Copa y los Juegos

El brasileño se ha ganado el respeto de sus compañeros y sus elogios públicos empezando por los de Messi: “Es maravilloso jugar a su lado. Tiene mucho mérito lo que está haciendo”. “Ha crecido tanto a nivel individual como a nivel colectivo”, admite Iniesta. Y tercia Piqué: “No sólo se trata de goles y asistencias, sino intensidad en el juego y desequilibrio en el uno contra uno”.

A Neymar, además, en el horizonte se le adivina un verano movido: la Copa América del Centenario en EE UU (del 3 al 26 de junio) y Juegos Olímpicos en Rio de Janeiro y (entre el 4 y el 20 de agosto). Razón de sobra para la visita ayer de Dunga, el seleccionador de Brasil, a la Ciudad Deportiva, donde habló con Luis Enrique. Pretende el asturiano convencerle de que escape de participar en las dos competiciones, aunque ayer despachó el tema diciendo que a estas alturas, le preocupa poco. “Queda mucho, lo arreglaremos con diálogo. Tenemos en común que todos queremos lo mejor para él”, concluyó. Brasil nunca ha ganado unos Juegos, y Messi y Mascherano le han contado que es una competición especial. Mientras, Neymar terminó la fiesta y regresa al festival.