La postura de Boric ante la crisis venezolana le da alas a su aprobación en Chile
El mandatario toca su máximo nivel de apoyo en 14 meses, según la encuestadora Cadem, tras dos semanas marcadas por su dura postura contra Maduro y la crisis eléctrica producto de un feroz temporal
El presidente chileno Gabriel Boric goza de la mayor aprobación ciudadana en los últimos 14 meses, hasta un 37%, según los datos publicados este domingo por la encuestadora Cadem. La desaprobación, por su parte, ha retrocedido hasta el 55%. El mandatario ha escalado seis puntos en las últimas dos semanas, que han estado marcadas por su dura posición contra Nicolás Maduro tras las elecciones venezolanas y la crisis eléctrica producto de un temporal de viento y lluvia. Sin considerar la Cuenta pública celebrada en junio de 2023, este es el apoyo más alto al jefe de Estado desde septiembre de 2022, previo al plebiscito de salida del primer proceso constitucional, controlado por las izquierdas, que los votantes rechazaron con contundencia (62%) y marcaron un antes y después en la Administración.
En los cuatro gobiernos anteriores, liderados por la socialista Michelle Bachelet (2006-2010, 2014-2018) y Sebastián Piñera (2010-2014, 2018-2022), de la derecha tradicional, ninguno registró el nivel de respaldo de Boric en el mismo periodo de mandato; dos años y medios de gestión. La abogada Antonia Urrejola, excanciller del presidente chileno, se explica la buena aceptación del discurso de Boric ante Caracas por el factor migratorio. “Una nueva crisis en Venezuela tiene un efecto. Hay otras crisis mundiales que para la gente no son tan cercanas, pero esta, precisamente por la ola migratoria, es más palpable y que el presidente sea tan duro en el tema hace que la ciudadanía vea su preocupación por el asunto”, señala.
La forma con que el mandatario chileno ha plantado cara a las cuestionadas elecciones presidenciales venezolanas del 28 de julio ha sido secundada no solo por su gabinete y líderes internacionales, sino también por la gran mayoría de los chilenos (87%). La derecha, por su parte, celebró la posición inicial de Boric, pero en los últimos días han redoblado la presión para que reconozca a Edmundo González como presidente electo de Venezuela. Urrejola, expresidenta de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), plantea que la demanda de la oposición es un punto político para diferenciarse y “poder ir más allá de lo que esta haciendo el presidente”. “Es que antes de que alcanzaran ellos a reaccionar, el presidente ya había reaccionado. Pero en la opinión pública no creo que esté instalado el tema de reconocer a González. La gente ve si reconoce o no Maduro y que se vaya”, añade.
Desde que estalló la crisis en Caracas, la aprobación de Boric, quien ha exigido la “total transparencia de las actas y el proceso” y ha asegurado que el líder del régimen chavista intentó “cometer fraude”, ha ido al alza. En Chile, un 94% de los encuestados por Cadem consideran que Venezuela es una dictadura y solo el 1% tiene una imagen positiva de Nicolás Maduro. Ante una posible nueva ola migratoria hacia el país sudamericano, donde viven 700.000 venezolanos, sólo un 34% apoya ofrecerles asilo. La Administración de izquierdas ya ha desplegado un operativo para hacer frente a la llegada masiva de personas procedentes del país caribeño que incluye fortalecer el control fronterizo y coordinación con los otras naciones de la región.
La política internacional de Boric en la defensa de la democracia y los derechos humanos suele repercutir positivamente en su imagen local, al igual que las giras presidenciales. Tres de cada cuatro chilenos consideran que fortalecen la imagen del país en el extranjero. “La gente ve como nuevos aires de liderazgos desde la izquierda. Hay una lectura de cómo a las pocas horas sacó un tuit [exigiendo transparencia en el conteo], que ha actuado en base a convicciones y no siguiendo las olas de otros presidentes de la región. Guardando las diferencias, es como el no de Ricardos Lagos a la invasión de Estados Unidos en Irak”, apunta.
En materia local, las dos últimas semanas han estado marcadas por un frente de mal tiempo, acompañado de vientos de hasta 124 kilómetros por hora, que azotó la zona centro y sur de Chile a comienzos de mes y dejó a cientos de miles de hogares sin luz. Hasta este lunes todavía 34.000 clientes no cuentan con el suministro eléctrico, según la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC). La Cadem arroja que el 55% de los encuestados cree que las empresas de electricidad son las principales responsables de lo ocurrido, el 31% que nadie porque es algo excepcional producto de la fuerza del viento que nunca se había visto en el país y solo un 7% se lo achaca al Gobierno de Boric. La Administración de izquierdas ha presionado contra las empresas eléctricas, especialmente contra Enel, que abastece de energía a 33 de las 52 comunas de la Región Metropolitana.
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