El modelo Sarkozy se impone
La industria discográfica de EE UU cambia las demandas por los avisos para frenar las descargas
Por mucho que algunos quieran ver fantasmas donde no los hay, la realidad es tozuda: el sistema de avisos parece imponerse en todo el mundo para controlar las descargas de material protegido de Internet. El último en anunciar su intención de adoptarlo ha sido la Asociación de la Industria Discográfica de Estados Unidos (RIAA, en sus siglas en inglés), quien abandona así una estrategia que le ha llevado a demandar a más de 30.000 personas en los últimos años.
El pasado viernes la RIAA anunció que dejará de llevar a los tribunales a quienes coja descargándose canciones protegidas por derechos de autor, una práctica que le ha granjeado una pésima reputación social, en especial cuando los denunciados eran abuelos, mujeres solteras o familias, en un país donde en 2008 se han vendido más de 1.000 millones de canciones on line y donde la copia privada no es un derecho reconocido por la ley, al contrario de lo que pasa en España.
Así, la industria discográfica estadounidense ha decidido apuntarse al modelo francés de tres avisos. La RIAA mandará una carta a los proveedores (ISP) de Internet para que identifiquen la dirección IP de los sospechosos de compartir archivos protegidos; después, serán las ISP las que enviarán los avisos a los usuarios quienes, si no atienden a las reclamaciones de las operadoras, verán como se quedan sin acceso a Internet.
Y no son los únicos. Según informa la revista Wired, la industria cinematográfica se está planteando adoptar el mismo sistema.
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