Barcelona a medio gas
El metro estará cerrado hasta las 17.00 horas -El 90% de los taxistas no ha ido a trabajar
Paro prácticamente total en la gran industria, 27% menos de consumo eléctrico, ejes comerciales semivacíos, mercados municipales cerrados, bares y restaurantes con la persiana bajada a medias, basuras amontonadas hasta el mediodía y un tráfico mucho menos denso del habitual. Es la imagen que hoy ofrece Barcelona debido al seguimiento notable de la huelga general. Sin embargo, el contraste entre la normalidad relativa del centro de la ciudad y el parón en los barrios periféricos es total.
Transportes
En los transportes el seguimiento ha sido masivo, aunque los servicios mínimos del 25% se han cumplido en el Metro, autobuses y Ferrocarriles de la Generalitat. Más de 2.000 sindicalistas españoles y franceses han protagonizado cortes en la carretera Nacional II cerca de la frontera con Francia, de modo que el tráfico rodado ha tenido que ser desviado por la autopista AP 7.
El Metro ha dejado de funcionar a las 9.30 horas y volverá a ponerse en marcha a las 17.00 horas. Los vehículos han viajado cargados de viajeros, pero sin estar abarrotados. En las cocheras de Zona Franca se han vivido algunos momentos de tensión entre piquetes, empleados y policía, sin que los problemas hayan ido a más.
Los viajeros peor parados han sido los de los trenes regionales, para los que no había previstos servicios mínimos. Los pasajeros que han intentado como alternativa viajar en autobús entre Girona y Barcelona se han visto afectados por los piquetes, que no han dejado salir el autobús. UGT asegura que el conductor no llevaba el documento sellado que le acreditaba para realizar servicios mínimos. Hay indignación entre los usuarios.
Tampoco ha podido salir de Girona un autobús de la empresa Alsa que debía llegar a las siete de la mañana al aeropuerto de El Prat. El propio conductor ha admitido que no llevaba el documento que le acredita para realizar los servicios mínimos. Varios viajeros que ya tenían billete de avión buscaban desesperadamente otra vía para llegar a El Prat, como el autoestop.
Menos tráfico en la ciudad
En las calles de Barcelona hay pocos taxis circulando. El Sindicato del Taxi señala que el 90% de la flota no ha salido a trabajar. En el Eixample de Barcelona mucha gente ha decidido ir a trabajar andando o en bicicleta (el servicio de Bicing funciona) para evitar aglomeraciones. El tráfico de coches privados es inferior al de una jornada laborar normal. Los piquetes han realizado cortes intermitentes en grandes avenidas, como la de la Diagonal y la Meridiana. El consejero de Política Territorial y Obras Públicas de la Generalitat, Joaquim Nadal, ha cargado contra estas acciones y ha acusado a los piquetes de "desprestigiar" la huelga.
Aeropuerto
El aeropuerto de El Prat opera con el 10% de los vuelos con otras ciudades peninsulares y el 50% de los que unen la capital catalana con las islas. En el caso de los trayectos internacionales, vuelan el 20% de los aviones que conectan con las capitales europeas como Francfort, Milán y Zúrich y el 40% de los vuelos intercontinentales. La mayoría de las compañías aéreas están facilitando a sus clientes cambiar su vuelo. Iberia, Vueling y Spanair, por ejemplo, ofrecen el cambio de fecha sin coste alguno a través de sus teléfonos de atención al cliente.
Empresas paradas
Los convocantes de la huelga se han anotado un notable éxito al lograr un paro casi total en la industria y la construcción. Las plantas de Seat, Nissan, Alstom, Ercros, Pirelli, Delphi, Sony y Yamaha han detenido su actividad, al igual que las del sector agroalimentario como Colega, Damm, Nutrexpa y Freixenet. El consumo eléctrico ha descendido hasta los niveles de un día festivo. Tampoco se trabaja en las grandes obras, como las de la Línea 9 del Metro cerca de la Sagrada Familia.
Persianas arriba
El comercio está abriendo las puertas sin incidentes y bien surtido de productos en la mayor parte de Barcelona. En las calles del Eixample pueden verse bares, quioscos y panaderías trabajando, aunque sus responsables notan un descenso de la clientela. En barrios como El Clot, sin embargo, los piquetes han invitado a las tiendas y puestos del mercado a cerrar. Muchas persianas, además, han amanecido saboteadas con masilla en las cerraduras. Algunas oficinas de correos también han sufrido el embite de los piquetes. En la oficina de la calle de Lluçà, en el barrio de Les Corts, una decena de empleados no pueden acceder a sus puestos de trabajo. El mercado de la Boquería, en La Rambla, estaba a las ocho de la mañana casi desierto, con apenas una décima parte de las puestos de venta abiertos.
Mercabarna
Mercabarna sí ha sufrido el acoso de los piquetes, que han impedido el acceso de los compradores y han dejado sin actividad el matadero y el mercado de pescado. La patronal de la pequeña y mediana empresa, Pimec, ha lanzado un duro comunicado contra los piquetes. En sanidad y educación no hay noticias del impacto de la huelga. Los sindicatos médicos y enfermería no secundan la huelga y las urgencias funcionan con normalidad. Habrá que esperar a que avance el día para comprobar el impacto del paro en las citas médicas y los centros escolares. Los medios públicos de la Generalitat han dejado de emitir. TV-3 ofrece documentales y música.
Educación
El paro ha sido casi total en las facultades universitarias de la avenida Diagonal. En Arquitectura, la gran mayoría de las clases han sido suspendidas bien por la falta de alumnos o por la ausencia de profesores. Pasillos y aulas se encontraban prácticamente vacíos, al igual que en la escuela de Ingenieros Industriales y en Químicas, todas ellas de la Universidad Politécnica. En la Autònoma, el 57% del profesorado y del personal ha secundado la huelga. Aunque todas las facultades estaban abiertas, no ha habido clase en el campus debido a la gran ausencia del alumnado.
En la educación primaria y secundaria el paro ha sido mucho más reducido. La consejera de Trabajo, Mar Serna, cifra en el 20,8% el seguimiento en los centros públicos y del 11,4%, en los privados concertados. En las escuelas públicas en las que ha estado EL PAÍS, en el centro de la ciudad, el seguimiento se ha situado en torno al 15% por parte de los profesores y en el 90% en el caso de los alumnos. "Muchos no vienen por problemas de transporte", ha explicado Robert Díez, profesor del IES Miquel Tarradell, en el Raval. CCOO, en cambio, cifra en un 62% el seguimiento entre los profesionales.
Sanidad
El 7,1% de los trabajadores sanitarios han secundado la huelga en los hospitales públicos y el 5,9 % en los privados concertados, según Serna. La jornada ha transcurrido con casi total normalidad en los centros sanitarios, en los que los sindicatos médicos y de enfermería no apoyaban la huelga. En el hospital de Bellvitge ha bajado la afluencia en urgencias debido a los problemas de transporte, según fuentes del centro. Las consultas externas no se han anulado y han funcionado con normalidad, al igual que en el resto de los grandes hospitales.
Equipamiento musicales
Ni el Auditori de Barcelona, ni el Teatro del Liceo, ni el Palau de la Música Catalana tenían conciertos programados para hoy. El mayor seguimiento del paro de las tres plantillas de los principales equipamientos musicales de la capital catalana se registró en el Liceo, donde el 25% de los 355 empleados que trabajaban hoy del total de la plantilla, 403, secundaron la huelga. En el Palau de la Música el seguimiento del paro ha sido de un 16%. Las taquillas han funcionado con normalidad y todas las visitas al auditorio modernista programadas se han realizados sin problemas. Sin, embargo, al mediodía un piquete a su paso por el Palau ha lanzado una piedraque ha resquebrajado uno de los cristales de la fachada de la plaza del Palau. En el Auditori de Barcelona el seguimiento de la huelga se ha reducido a un 12%. La dirección de la Orquestra Simfònica de Barcelona i nacional de Catalunya (OBC) había negociado con los músicos el cambio de día del ensayo previsto para hoy.
Huelga de usuarios
En las oficinas de atención al ciudadano de la Generalitat y del Ayuntamiento de Barcelona la huelga ha sido de usuarios. A mediodía no había casi nadie en la oficina de información universitaria ni en la sede de la Agencia Tributaria en Cataluña. "Lo que hay es huelga de contribuyentes", decía irónicamente una responsable de la Agencia. De las 41 ventanillas de atención al público había siete abiertas y sobraban. Tampoco había actividad en la oficina de atención del distrito de Ciutat Vella. Solo funciona el registro, pero los tres empleados de guardia estaban sentados sin hacer nada pasadas las doce del mediodía. "Sin transporte, la gente ha decidido no venir", decía uno de ellos.
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