Valor para el futuro, incógnita para el presente
La primera vez que le preguntaron si España estaba preparada para tener a una mujer como presidenta, Chacón se quedó sorprendida. No tanto, sin embargo, como del revuelo que provocó su obvia respuesta: España no está menos preparada que Chile, Argentina, Brasil, Liberia, India, Alemania, Reino Unido y tantos otros países que tienen o han tenido a mujeres al frente del poder ejecutivo.
La segunda vez que le hicieron la misma pregunta, Chacón ya llevaba la contestación aprendida: dijo que, para llegar a La Moncloa, no basta con querer (y nadie duda de que ella quiere), sino que hace falta ser querida. Por los militantes del PSOE y por los votantes, que son quienes deben otorgarle su confianza.
El presidente castellano-manchego, José María Barreda, dijo de ella que es "joven, aunque sobradamente preparada" y que tiene "más futuro que pasado".
Chacón es joven, aunque ya no tanto. Acaba de cumplir 40 años. La edad que tenía Felipe González cuando llegó a La Moncloa y Zapatero cuando se convirtió en líder del PSOE. Pero está mejor preparada que los dos citados a su edad; ha sido teniente de alcalde de su localidad natal, Esplugues de Llobregat (Barcelona); vicepresidenta primera del Congreso; ministra de Vivienda y ministra de Defensa, la primera en la historia de España.
Para descartar su candidatura, sus oponentes cuestionan que el PSOE pueda postular a alguien que pertenece a otro partido. Es una malevolencia, ya que Chacón pertenece a la Comisión Ejecutiva del PSOE, aunque es dirigente del PSC, lo que no es lo mismo pero es igual. Tener una silla en Barcelona y otra en Madrid es una forma de estar en dos sitios a la vez. Aunque se corra el riesgo de no estar en ninguno. Parecer catalana en Madrid y madrileña en Cataluña.
Chacón está acostumbrada a convivir con identidades diversas. Su madre es catalana y su padre almeriense. No oculta su admiración por su abuelo, un anarquista aragonés, pero conserva buenos recuerdos del colegio de monjas donde estudió.
También ha demostrado que no se arredra ante las dificultades. Ni su mediana estatura ni su cardiopatía congénita la disuadieron de jugar al baloncesto. Y el embarazo de su primer hijo, Miquel, no le impidió visitar a las tropas en Afganistán, al poco de tomar posesión de la cartera, en abril de 2008.
Chacón formó parte de Nueva Vía, el grupo que aupó a Zapatero a la secretaría general del PSOE y en el que tiene amistades íntimas, como Leire Pajín. En diciembre de 2007 se casó con Miguel Barroso, ex secretario de Estado de Comunicación. Algunos atribuyen a la influencia de su marido su aparente aversión a las ruedas de prensa y su sustitución por la photo opportunity; otros la excusan apelando a la rigidez que impone el cargo.
Sea o no deliberado, Chacón ha logrado mantenerse a resguardo del desgaste y las encuestas del CIS la sitúan de modo persistente como una de las ministras mejor valoradas.
Tras el 22 de mayo se sabrá si, parafraseando a Barreda, Chacón sigue siendo una mujer con más futuro que presente. Para evitarlo, tendrá que saltar a la arena y pelear la sucesión de Zapatero en la dura batalla de las primarias. Ella ha sido de las primeras en pedirlas, pero nunca ha dicho que vaya a presentarse.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.