Socios y oposición recuerdan a Montilla que ya descartó el pacto a tres en 2006

Por una vez, tanto los socios del PSC -ERC e ICV- como la oposición -CiU y PP- coincidieron y les faltó ayer tiempo para salir en tromba desde primera hora a recordar al presidente de la Generalitat y candidato socialista, José Montilla, que ya enterró el tripartito hace justo cuatro años, en vísperas a las anteriores elecciones autonómicas: "No ambiciono un segundo tripartito", dijo entonces Montilla en un desayuno informativo. "El tripartito es irrepetible. Han cambiado las personas, las prioridades y el contexto. No se puede hablar de reedición", añadió en una entrevista semanas antes de rubricar el segundo pacto a tres. También entonces utilizó la expresión "el tiempo del tripartito ya ha pasado", como el domingo en el Liceo, cuando sepultó el acuerdo pero reivindicó su herencia.

Los socialistas creen que el fin del acuerdo dará un vuelco al resultado electoral

La respuesta del propio Montilla y de la ejecutiva de su partido fue insistir en que el momento es distinto y que los planteamientos de los socios son "inasumibles" Se referían, sobre todo, a la condición que Esquerra antepone a cualquier pacto: la celebración de un referéndum independentista. En la calle de Nicaragua de Barcelona (sede del PSC) están convencidos, así lo afirmó la número cuatro de la lista socialista, Laia Bonet, de que la renuncia a un tercer tripartito dará un vuelco al resultado electoral. A día de hoy, las encuestas auguran tal debacle a PSC y ERC que ni siquiera sumando los votos de ICV sería posible un nuevo pacto de izquierdas.

Los socios minoritarios del tripartito, ERC e ICV, aprovecharon para reclamar el voto útil frente a la huida del PSC. El republicano Joan Ridao aseguró que solo Esquerra representa el catalanismo de izquierdas; al mismo tiempo, el ecosocialista Joan Herrera situó a su formación como la referencia "para plantar cara a la derecha". Ridao aprovechó incluso para sacar pecho y vanagloriarse de que ERC "haya marcado la agenda política" durante siete años.

La oposición tiró de hemeroteca para lanzar un dardo a la credibilidad de Montilla. El secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, acusó al presidente de "soltar una gran mentira": "Estas palabras ya las dijo en 2006", recordó. En la misma línea, la líder del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, consideró que Montilla, si tiene oportunidad, reeditará el tripartito "para aferrarse a la silla".

Ante esta acusación, los socialistas catalanes son tajantes: "No nos queremos jugar un cargo por el futuro del país", respondió Bonet. Tras la ejecutiva del PSC, la actual secretaria del Gobierno catalán también matizó las palabras con las que Montilla finiquitó el tripartito el domingo. "No al tripartito en las condiciones actuales", dijo Bonet hasta una veintena de veces. También aseguró que igual que en Ferraz, la ejecutiva del PSC aplaudió unánimemente el anuncio de Montilla. "Ha habido plena sintonía y entusiasmo y optimismo con la necesidad de dar el mensaje que dio el presidente", recalcó.

Los socialistas catalanes exigieron además a su principal rival, el líder y candidato de CiU, Artur Mas, que aclare si prefiere pactar con ERC o con el PP. Descartaron asimismo un gran pacto entre Montilla y Mas. Apuntaron, no es la primera vez, que solo "una situación excepcional" daría pie a un pacto con CiU.