Políticos y artistas a bordo
Una premio Nobel de la Paz, una superviviente del Holocausto, el escritor sueco Henning Mankell y un líder islámico israelí viajaban en la flotilla
Un célebre escritor sueco que abraza causas solidarias en África. Una veterana premio Nobel de la Paz de Irlanda del Norte. Otra activista estadounidense judía de origen alemán, que empezó a dirigir su mirada hacia Palestina tras la matanza, en 1982, de Sabra y Chatila, en Beirut. Y un líder musulmán de Israel. Todos ellos navegaban a bordo de los seis barcos de la flotilla humanitaria asaltada antes de poder atracar en Gaza. Una docena de diputados de varios países europeos también compartieron singladura.
HENNING MANKELL Escritor sueco
El domingo pasado Henning Mankell (Estocolmo, 1948) se sumó a la flotilla de Gaza. Durante 48 horas tuvo que negociar con las autoridades chipriotas y turcas para que le permitieran abordar el buque. "Lo más importante es poder participar en la última parte del viaje", declaró el escritor a la radio pública sueca el jueves de la semana pasada. "Cuando se habla de solidaridad, hay que ser consciente de que el destino pasa por la acción. Es con las acciones como nosotros mostramos que estamos dispuestos a apoyar lo que creemos importante", añadió.
Desde hace muchos años divide su tiempo entre Suecia y Mozambique, donde dirige el teatro Nacional Avenida de Maputo. "El mundo me da asco. La mayor parte de la miseria se podría evitar". La experiencia que acaba de atesorar tampoco ayudará a que mejore su opinión sobre el planeta. Aunque se desataron rumores que aseguraban Mankell había sido herido, el autor salió ileso de la experiencia.
"Nuestra embajada ha hablado con Mehmet Kaplan, un parlamentario sueco que formaba parte de la flotilla, quien afirmó que el autor y otros cuatro suecos habían ya desembarcado en tierra", dijo la ministra portavoz, Ingrid Palmklint, a la agencia France Presse.
HEDY EPSTEIN Superviviente del Holocausto
Ya intentó en 2008 embarcar en una expedición marítima similar rumbo a Gaza, pero una afección de su salud se lo impidió entonces. Ahora, a los 85 años, Hedy Epstein -activista estadounidense nacida en Alemania de una familia judía, que emigró al Reino Unido en 1939 y a Estados Unidos en 1948- navegaba a bordo de uno de los seis barcos atacados ayer en el Mediterráneo. Toda su familia, salvo dos parientes, fueron exterminados en Auschwitz, lo que no le ha ahorrado acusaciones de antisemitismo por su activismo político contra las políticas del Estado de Israel respecto a los palestinos. Fue precisamente la matanza de palestinos en los campos de refugiados de Sabra y Chatila (Beirut), en septiembre de 1982, lo que le animó a implicarse en el activismo contra los atropellos de Israel. En 2004, ella misma denunció que fue desnudada en el aeropuerto de Ben Gurion por guardias de seguridad.
Epstein ha trabajado para el International Solidarity Movement, una de las organizaciones más combativas en suelo palestino y, seguramente, la más perseguida por los servicios de seguridad hebreos. A esta organización no gubernamental pertenecía también Rachel Corrie, la mujer veinteañera que murió aplastada por un tanque israelí en la ciudad de Rafah, en Gaza, en marzo de 2003.
MAIREAD CORRIGAN MAGUIRE Premio Nobel de la Paz
A sus 66 años, la premio Nobel de la Paz Mairead Corrigan Maguire -galardonada por su activismo pacifista en Irlanda del Norte- repetía ayer singladura rumbo a Gaza. A comienzos de julio del año pasado, Corrigan, nacida en Belfast, intentó desembarcar en Gaza, pero se lo impidieron las patrulleras israelíes. Fue detenida y deportada. Igual que ahora.
Nunca se ha amilanado. En 2004 viajó a Israel y dio la bienvenida a Mordejai Vanunu, el científico nuclear israelí que reveló la existencia de un arsenal nuclear en Israel y que acababa de abandonar la cárcel tras 18 años de encierro, aunque una vez cumplida la sentencia sigue siendo perseguido por los gobiernos israelíes. Corrigan ha sufrido un balazo de goma por acudir en 2007 a la manifestación que se celebra cada viernes en Bilin contra el muro que expolia tierras de la Cisjordania ocupada. Y en abril de 2009 acusó a Israel de practicar "una política de limpieza étnica". El año pasado fue encarcelada, junto a la ex congresista Cynthia McKinney, después de que el barco en el que se aproximaba a Gaza fuera interceptado.
RAED SALAH Líder islámico en Israel
Es frecuente ver a Raed Salah, jefe de la rama norte del Movimiento Islámico de Israel, en manifestaciones y protestas contra la demolición de casas en Jerusalén Oriental o contra la expulsión de palestinos de sus viviendas para que las ocupen los colonos judíos más radicales, especialmente en el barrio jerosolimitano de Sheij Jarrah. Su presencia en esos actos es tan frecuente como sus continuas detenciones por la policía israelí desde 2003, cuando fue acusado de financiar a Hamás, cargo que negó tajantemente. Purgó dos años de prisión.
Algunos medios de comunicación informaban ayer de que Salah, padre de ocho hijos, había sido herido de gravedad. De ser así, no sería de extrañar que las manifestaciones de ayer en varias ciudades de los territorios palestinos adquirieran mayor gravedad.
Desde febrero de 2007, Salah ha destacado por su activismo contra las excavaciones que se realizan en torno a la Explanada de las Mezquitas. Ha sido perseguido por la policía israelí por organizar reuniones después de que fueran prohibidas por las autoridades. "Este comportamiento infantil de las fuerzas del orden no acrecenta la seguridad de los israelíes. Esto convierte la situación de la seguridad en más explosiva", opinó Salah.
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