Imaz pide a los jueces que "apliquen la ley teniendo en cuenta el contexto" del alto el fuego permanente de ETA

El presidente del PNV, Josu Jon Imaz, reclamó ayer que "los jueces deberían aplicar la ley teniendo en cuenta el contexto, las circunstancias del entorno social", en referencia a que deben ser más flexibles tras la declaración de alto el fuego permanente de ETA. Imaz hizo esta declaración, en su intervención en el foro Europa Press, antes de conocer la sentencia condenatoria de la Audiencia Nacional contra el líder de la ilegalizada Batasuna, Arnaldo Otegi.

Imaz argumentó que en el último cuatrienio de José María Aznar "se violentó el Estado de Derecho" y el Poder Judicial "actuó con un impulso político procedente del Gobierno". Tras acusar al presidente del Consejo General del Poder Judicial, Francisco José Hernando, "de haber hecho más política que los políticos", le calificó de "retrógrado". Hernando fue elegido en la etapa de Gobierno de Aznar. A renglón seguido, Imaz reclamó que "la Justicia vuelva a su punto de equilibrio".

La intervención del presidente del PNV contó con una numerosa presencia nacionalista vasca y catalana, y también con una relevante representación socialista: su secretario de Organización, José Blanco, y el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla. El PP envió a Elvira Rodríguez, diputada y ex ministra de Medio Ambiente.

Imaz reclamó el acercamiento inmediato de presos de ETA a cárceles del País Vasco. Ofreció dos argumentos: que el Parlamento Europeo aprobó en 1997 el acercamiento de los presos a sus lugares de origen para no penalizar a sus familias y que a las cinco semanas del alto el fuego de ETA, en la declaración de tregua de 1998 y siendo presidente José María Aznar, el Congreso de los Diputados aprobó por unanimidad una proposición de flexibilización de la política penitenciaria.

A raíz de dicha proposición, el Gobierno de Aznar impulsó dos acercamientos de presos a cárceles vascas que afectaron a más de dos centenares de ellos: en diciembre de 1998 y en septiembre de 1999.

El presidente del PNV dijo también que la tarea de la paz "implica a muchos agentes políticos y sociales imprescindibles para llevarla a buen término", y reservó para su partido un papel relevante en "la reconciliación entre los vascos".

En cuanto al reciente debate que ha vinculado el futuro de Navarra con el proceso de paz lanzado por el presidente de la comunidad de Navarra, Miguel Sanz, Imaz lo calificó de "falso debate". "El futuro de Navarra ni va a estar ni puede estar condicionado en ningún momento al diálogo con una organización terrorista", dijo Imaz. "El PNV aceptará lo que decida la sociedad navarra, porque los territorios no pueden estar por encima de las personas", añadió.