El contacto de Brahim fue cofundador de la red de Bin Laden

Si todo es como dicen los servicios antiterroristas españoles, el argelino Ahmed Brahim, de 57 años, mantuvo estrechas relaciones hasta su detención con el sudanés criado en Irak Mamdouh Mahmud Salim, Abu Hajer al Iraqui, cofundador de Al Qaeda en Sudán. Éste fue detenido en septiembre de 1998, un mes después de los atentados de Kenia y Tanzania, en Alemania y extraditado más tarde a Estados Unidos, donde también se le acusó de otra multitud de delitos por los tribunales del distrito sur de Nueva York.

El fiscal del distrito consideró probado que en 1989 gestionó campos de entrenamiento en Afganistán y Pakistán creados por Bin Laden. Durante ese mismo año mantuvo contactos con miembros de la red en Malaisia, China, Filipinas y Alemania. Supuestamente fue creador o gestor de empresas pantallas de Bin Laden, como Taba Investments, Khartoum Tannery y, sobre todo, Wadi Aqiq, firma que facilitó 'equipos de comunicaciones y armas convencionales a la organización'.

Posteriormente, jaleó la revuelta de Somalia de 1993 contra la entrada de tropas de EE UU en dicho país, con el argumento de que era el primer paso para un ataque masivo contra los musulmanes. Los agentes del FBI admiten que Abu Hajer los engañó cuando fueron a interrogarle a Alemania sobre los atentados en África. Cuando ya estaba encarcelado en la celda número 10 del ala de máxima seguridad del Correccional Metropolitano de Nueva York, fue acusado de conspiración para, primero secuestrar a funcionarios del penal y, después, asesinar a alguno de ellos si no se cumplían sus exigencias. En su celda fueron halladas notas de los preparativos. Finalmente, hirió en un ojo a uno de sus costodios con un objeto punzante: un cepillo de dientes al que sacó punta.