El viceconsejero de Justicia también dimite y ahonda la crisis en el Gobierno andaluz
Dos directores generales más dejan la Consejería que ha abandonado Pizarro
El Gobierno andaluz no levanta cabeza. Ha intentado que la crisis abierta por la dimisión del consejero de Justicia, Luis Pizarro, histórica mano derecha de Manuel Chaves, durara horas, pero no le ha salido bien. Por la mañana designaba sustituto y, tras el acto oficial, otra dimisión: la del viceconsejero de Justicia, José Antonio Gómez Periñán.
A la marcha de Gómez Periñán se ha unido la de los directores generales de Administración Local y Espectáculos Públicos y Juego, José María Reguera y Manuel Brenes, respectivamente. Estos socialistas gaditanos también se incorpraron a la Consejería de Gobernación después de que Luis Pizarro fuese nombrado titular de este departamento.
El terremoto de la marcha del ya exconsejero de Justicia de la Junta de Andalucía acaba de registrar una nueva réplica. El número dos de este departamento, el también gaditano José Antonio Gómez Periñán, ha presentado su dimisión en cuanto se ha hecho cargo de la Consejería el nuevo titular de este departamento, Francisco Menacho.
La renuncia ha sido presentada tras la primera reunión de Menacho con el personal de la Consejería, tras el acto oficial de la toma de posesión en la sede de Presidencia, en la sede de San Telmo.
El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, afronta su peor crisis política y de Gobierno. La primera evidencia la ruptura total con una de las provincias más importantes para el socialismo andaluz y con el antecesor al frente del Ejecutivo, el actual vicepresidente, Manuel Chaves. La segunda pata de esta crisis deja la Administración de Griñán sin elementos fundamentales a pocos días de las elecciones municipales y un año de las autonómicas.
El detonante ha sido el cese del delegado de la Junta en Cádiz, Gabriel Almagro, cuya destitución ayer llevó a la dimisión de Pizarro y ahora a la de Gómez Periñán. En definitiva, una revolución en el PSOE de Cádiz en el peor momento y que empezó a alimentarse cuando José Antonio Griñán fue elegido secretario regional en marzo de 2010. Entonces ofreció al dirigente provincial gaditano, González Cabaña, que formara parte de la ejecutiva y dejara la presidencia de la Diputación y la alcaldía de Benalup. Cabaña aceptó durante horas, pero no culminó la operación por la que Griñán quería controlar el partido en Cádiz.
González Cabaña es un baluarte para Alfredo Pérez Rubalcaba, diputado por Cádiz. La dirección gaditana entiende que Griñán quiere tener el control de todo el partido antes del congreso federal.
Gómez Periñán accedió al cargo de viceconsejero en abril de 2009 tras haber ocupado durante nueve años el puesto de delegado del Gobierno de la Junta en Cádiz.
Nacido en Chiclana de la Frontera (Cádiz) en 1954, Gómez Periñán es diplomado de Educación Primaria por la Escuela Universitaria de Formación del Profesorado de Cádiz.
En el plano orgánico, es miembro de la Comisión Ejecutiva Provincial del PSOE de Cádiz, donde ocupa la Secretaría de Relación con Agentes Sociales.
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