El Parlamento vasco aprueba que se embarquen militares en los atuneros
PNV y PP sacan adelante la resolución.- "Es momento de traer a los hombres, no de políticas", dice la mujer de un tripulante
El Parlamento vasco ha pedido hoy el embarque de militares españoles en los atuneros que faenan en aguas del Índico para protegerlos de los ataques de los piratas. Esta resolución ha sido aprobada por 42 votos, los del PNV y PP, y ha contado con la oposición de 32 parlamentarios: los del PSE-EE, Aralar, EA, EB y UPyD.
Una iniciativa parecida a la aprobada hoy en la Cámara de Vitoria fue rechazada en el Congreso de los diputados el 22 de septiembre pasado, donde el PP, CiU y BNG apoyaron un texto del PNV.
La enmienda de transacción presentada conjuntamente por el PNV y el PP ha sido votada por puntos. En uno de los aprobados, el Parlamento vasco ha instado al Gobierno de España a realizar "cuantas actuaciones sean necesarias para liberar a la tripulación del Alakrana, en el menor tiempo posible y sin peligro para la integridad de los tripulantes". Este punto fue apoyado por todos los parlamentarios, excepto los socialistas.
La Cámara autónoma ha pedido al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero que incremente los medios desplegados en la zona para proteger a los barcos españoles que trabajan en aguas internacionales. En este sentido, pide que mantenga conversaciones con las empresas atuneras españolas que faenan en el Índico para diseñar y llevar a la práctica las medidas que les "permitan faenar en dichas aguas con seguridad suficiente para sus tripulaciones".
Mientras no se llegue a este acuerdo, el Parlamento vasco insta al Gobierno a que, dentro de la Operación Atalanta o al margen de ella, posibilite el embarque en estos buques de infantes de marina, "en número suficiente y dotados de armamento correspondiente necesario para que las tripulaciones puedan faenar en condiciones de seguridad razonables, haciendo frente, si es el caso, a los intentos de asalto de los piratas que merodean por la zona".
El Legislativo autónomo también ha solicitado al Gobierno central que plantee en los distintos órganos internacionales la necesidad de incrementar el dispositivo de seguridad desplegado por la fuerza internacional frente a las agudas de Somalia.
Por último, insta al Gobierno vasco a que mantenga los contactos necesarios con el español para "exigir y hacer efectivas, de manera inmediata", estas medidas.
Los socialistas habían consensuado con EA, EB y UPyD una enmienda transaccional, que ha decaído, en la que pedían al Gobierno las medidas a su alcance para conseguir la liberación de los tripulantes del Alakrana y a las instituciones y a los armadores que tomen las medidas para "evitar riesgos" manteniendo la actividad de la industria atunera.
Durante el debate, Unai Rementeria (PNV) ha afirmado que la Operación
Atalanta "no sirve" para dar seguridad a los pesqueros en la zona y ha considerado que la solución adoptada por Francia, con la presencia de militares, está siendo "muy efectiva".
Antonio Damborenea (PP) ha recordado que los barcos que tienen militares abordo no son secuestrados por piratas, por lo que su grupo no iba a "vetar ninguna medida".
Benjamin Atutxa (PSE-EE) ha argumentado que embarcar militares en los atuneros es "pan para hoy y hambre para mañana", y se ha preguntado si no sería conveniente que los armadores se plantearan renunciar a ciertos caladeros a cambio de conseguir una mayor seguridad, como el Playa de Bakio, que ahora faena en el Atlántico.
"Es momento de traer a los hombres, no de políticas", dice la mujer de un tripulante
La mujer de un tripulante del atunero vasco Alakrana, apresado hace siete días en las costas del Índico por piratas somalíes, ha dicho que "ahora mismo no es el momento de políticas, sino de traer a los hombres a casa con sus familias, y que después cada uno haga el trabajo que le corresponde".
En declaraciones a la agencia Efe, María Angeles Jiménez, esposa de Gaizka Iturbe, engrasador de 45 años, ha afirmado también que lo único que sabe es que "se ha abierto una vía de negociación y que tenemos que esperar".
Jiménez no ha querido entrar a valorar si el hecho de que hayan sido detenidos dos piratas que supuestamente han participado en el asalto al atunero va a suponer que se alargue la resolución del secuestro. "Yo no entiendo de esas cosas. Lo único que quiero es que no se alargue en el tiempo, es inhumano", ha asegurado la mujer, quien ha añadido que se le "clava en el alma" la posibilidad de que el secuestro se pueda prolongar en el tiempo.
Jiménez ha explicado que desde que el pasado domingo hablara con su marido no ha vuelto a tener comunicación con él y que entonces le notó tranquilo porque su objetivo era transmitirles a ellos esa sensación, con lo cual "haría el esfuerzo" de mostrar sosiego.
También ha asegurado que a su marido le faltaban 20 días para volver a casa tras cumplir la campaña de cuatro meses y que lo único que reclaman los marineros en la zona es "seguridad, igual que los demás países, que
Italia y que Francia, que se está llevando toda la campaña por tener a los infantes de marina" embarcados en sus buques atuneros.
La mujer ha asegurado que los pescadores son conscientes del peligro que hay en la zona, especialmente "desde hace seis años o siete", pero ha dejado claro que "el pan a la mesa hay que traer, y pagar y vivir, y es el trabajo que él tiene". Jiménez ha añadido que su marido lleva 24 años pescando en el Índico y que en el pasado han tenido "sustos", el último el 4 de septiembre, cuando pudieron escapar de un intento de secuestro por piratas somalíes al no tener las redes echadas.
Finalmente, y aunque ha asegurado que "no tiene fuerzas", ha dicho sentirse arropada por familiares y amigos, así como por la empresa armadora, que "nos llama y me infunden ánimos", la Secretaría del Mar, la consejera vasca de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Pilar Unzalu; y el alcalde de Sestao, José Luis Marcos Merino; quien hoy se ha puesto a su disposición.
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