La lección de coraje de Ana Obregón y el mensaje a su hijo
La presentadora reaparece emocionada pero serena tras la muerte de Álex Lequio y envía unas palabras de esperanza
Muchas veces se asomó Ana Obregón al balcón de la Puerta del Sol de Madrid para actuar como maestra de ceremonia en la noche en la que cambia el año. Esta Navidad lo ha hecho tras un tiempo de retiro marcado por el dolor de la muerte de su único hijo, Álex Lequio, fallecido en mayo a los 27 años víctima de un cáncer. La actriz reapareció emocionada pero serena junto a Anne Igartiburu que fue su pareja en esta ocasión, la primera en la que dos mujeres se encargaban de la ceremonia. Con un elegante vestido blanco- color de luto...
Muchas veces se asomó Ana Obregón al balcón de la Puerta del Sol de Madrid para actuar como maestra de ceremonia en la noche en la que cambia el año. Esta Navidad lo ha hecho tras un tiempo de retiro marcado por el dolor de la muerte de su único hijo, Álex Lequio, fallecido en mayo a los 27 años víctima de un cáncer. La actriz reapareció emocionada pero serena junto a Anne Igartiburu que fue su pareja en esta ocasión, la primera en la que dos mujeres se encargaban de la ceremonia. Con un elegante vestido blanco- color de luto en muchos países- y perfectamente maquillada, Obregón era pese a todo la imagen del dolor, un dolor contenido. “No quiero llorar”, dijo en varias ocasiones mientras a su lado, Igartiburu no podía remediarlo.
En una Navidad marcada por la pandemia que ha acarreado tantas pérdidas y tanto dolor, nadie como Obregón para intentar brindar un soplo de esperanza, ella que no para de buscarla desde mayo. “Estoy muy emocionada. De esta forma, me gustaría darles las gracias de corazón porque he recibido muchísimas muestras cariño. Quería estar aquí para agradecérselo”, dijo la actriz y presentadora dirigiéndose al público. Para añadir a continuación: “Esta noche quiero mandar un mensaje de esperanza. Sé que muchas personas que están en casa han pasado un año difícil y se identifican conmigo porque también han perdido a un ser querido. Esta noche, cuando suenen las 12 campanadas, sé que los vamos a recordar. Sé que vamos a mirar al futuro con la convicción de que juntos, pero con mucha responsabilidad, saldremos de este túnel”, aseguró Obregón mientras sonaba la actuación de Nacho Cano con Un año más de fondo, teniendo también un especial recuerdo a todas las personas que han fallecidos: “Por la pandemia, también muchísimas por el cáncer, que casi nunca se habla de ello. Por ello, los que son los verdaderos héroes de este año, los que han luchado hasta el final. Por los que siguen luchando, voy a pedir un aplauso”.
Ana Obregón desveló que cuando en otras ocasiones presentó las uvas mandó un beso a su hijo. Esta vez también lo hizo pero lanzándolo al cielo. “El motivo por el que quería estar aquí era para que la gente viese que estoy enviando un mensaje de esperanza aún siendo una madre que ha perdido a un hijo. Sé que todo el mundo lo está pasando mal, algunos peor que otros. Solo depende de nosotros. Con esta pandemia se puede acabar. Ya dispuesto, quiero pedir más dinero para la investigación del cáncer porque cada año mueren muchas personas en España. Son los grandes olvidados”, afirmó. Y añadió: “Lo más importante en esta vida es dedicar tiempo y amor a las personas que quieres, porque cuando te vas, es lo único que te llevas. Pero para dedicar ese amor y ese tiempo a las personas que quieres, tienes que tener a las personas que quieres contigo. Y para conseguir eso, tenemos que ser responsables”.