El PSOE aumenta su ventaja sobre el PP a cinco puntos tras la catástrofe de la dana en Valencia, según el CIS

Los populares pierden más de dos puntos tras el impacto de las inundaciones. Vox se mantiene, Alvise sigue al alza y Sumar toma oxígeno tras meses de caída

Feijóo, en primer término, en el Congreso durante una comparecencia en octubre de Sánchez. J. J. Guillén (EFE)

El PSOE incrementaría su ventaja sobre el PP a casi cinco puntos, con una estimación de voto del 34,2%, dos décimas más que en octubre, según el barómetro de noviembre del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). El partido de Alberto Núñez Feijóo, que en el sondeo anterior había recortado la distancia con el principal partido del Gobierno a 2,5 puntos, sufre el desgaste por la gestión de la dana que ha dejado más de 200 víctimas en Valencia: los populares se dejan más de dos puntos en un mes y pasan del 31,5% al 29,3%. La encuesta se realizó a 4.010 personas entre el 2 y el 7 de noviembre, es decir justo en los días posteriores a la tragedia, marcada por los errores en la gestión, mentiras y medias verdades de la Generalitat que preside el barón del PP Carlos Mazón. Hay que remontarse al barómetro de mayo, tras las elecciones catalanas, para encontrar un colchón similar a favor de los socialistas (5,1 puntos). La distancia entre los dos grandes partidos se redujo a un punto en junio según el instituto demoscópico que dirige José Félix Tezanos. El PP se impuso en las elecciones generales de julio de 2023 con un respaldo del 33,1%, insuficiente para gobernar, frente al 31,7% del PSOE.

A diferencia del PP, la ultraderecha no sale penalizada. Vox, que rompió en julio los gobiernos autonómicos con la formación de Feijóo, incluida la Comunidad Valenciana , se mantiene como la tercera fuerza más votada (11,8%). Exactamente igual que hace un mes, cuando perdió 1,3 puntos. Se Acabó la Fiesta, el fenómeno ultraderechista del eurodiputado ultra Alvise Pérez, que se desplazó a la zona cero de la dana en los días posteriores para tratar de capitalizar el desastre mientras agitaba bulos como que el Gobierno ocultaba la cifra real de fallecidos, gana tres décimas y alcanza el 2%.

Tras meses a la baja, Sumar, que había perdido 1,5 puntos en octubre, coge aire y se eleva al 7%. La subida, de siete décimas, se produce después de que estallara el escándalo de Íñigo Errejón, que dimitió a finales de octubre como portavoz parlamentario tras ser acusado de violencia machista. Aun así, el proyecto político que encarnó Yolanda Díaz sigue muy lejos del resultado que consiguió el 23-J, cuando cosechó más de tres millones de votos (12,3%), solo 12.000 menos que Vox. La ruptura con Podemos detonó el espacio a la izquierda del PSOE. A la espera de si se reconcilia o se agrava la guerra civil en la izquierda, el partido de Ione Belarra logra una décima más que en octubre (3,4%).

El pulso entre Junts y ERC en su batalla por la hegemonía en el independentismo catalán beneficia este mes a los neoconvergentes (1,7%), que experimentan una subida de cinco décimas tras el congreso en el que Carles Puigdemont revalidó su liderazgo. Algo que Esquerra (1,5%) deberá resolver a finales de mes. En País Vasco también se intercambian posiciones y ahora tendría ventaja EH Bildu (1%) sobre el PNV (0,8%).

Una vez más, ninguno de los líderes de los grandes partidos aprueba. Pero sí se produce un hecho muy llamativo: todos sufren una caída relevante en su valoración y ninguno llega al 4. Pedro Sánchez continúa siendo el mejor valorado pero lo hace con una nota de 3,86 puntos sobre 10 posibles, menos que octubre (4,13), cuando su figura ya se había visto resentida (4,28 en septiembre). Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, desciende de 3,99 a 3,68 puntos pero supera a Alberto Núñez Feijóo y es la segunda mejor valorada. El líder del PP se lleva el golpe más acusado, con una nota de 3,43 frente al 4,02 de octubre. Santiago Abascal, de Vox, sigue siendo el referente peor valorado de los principales partidos y empeora su nota con con un promedio de 2,66 puntos (2,93 en octubre).

El 22,1% de los encuestados prefieren a Sánchez como presidente del Gobierno y prácticamente triplican a quienes se decantan por Feijóo (8,6%). Una diferencia de 13,5 puntos respecto al barómetro de octubre: entonces los partidarios de que el secretario general del PSOE fuese el presidente del Ejecutivo (24,3%) superaban en 11 puntos a los que elegían a Feijóo (13,3%). Ahora, otro 6,9% optaría por Abascal y un 4,4% por la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en vez de por el líder del PP. Siguiendo con la comparativa entre Sánchez y Feijóo, el presidente le inspira mucha o bastante confianza al 25,7% de encuestados, por el 16,8% en el caso del aspirante a La Moncloa.

Otro factor a destacar es que se produce una importante subida, comparada con octubre, en la percepción de la política como problema. Los problemas políticos en general irrumpen como el principal problema que existe actualmente en España para el 23,8% de los participantes en la encuesta por delante del acceso a la vivienda (22,5%) y los problemas de índole económica (21,9%). Prestando atención a los discursos antipolíticos que surgieron por la respuesta tardía a la dana, el 17,4% de encuestados considera que el problema número uno del país es “el mal comportamiento de los políticos”; otro 13,3% señala al “Gobierno y partidos o políticos concretos”; el 5,8% apunta a “lo que hacen los partidos políticos”; al 1,7% les preocupa ante todo “la falta de acuerdos, unidad y capacidad de colaboración en una situación de inestabilidad política”; y a otro 1% les ocupa el funcionamiento de la democracia.

La inmigración, que los dos meses anteriores fue el principal problema que existía en España, baja al quinto puesto (18,4%), casi diez puntos menos que en octubre (28,1%). En el barómetro de septiembre del CIS casi uno de cada tres españoles (el 30,4%) contestó que el mayor problema era “la inmigración”, que ya fue la cuarta preocupación en julio —así figuraba en la encuesta de ese mes, con un 16,9%, por debajo del paro, la economía y “los problemas políticos en general”— mientras que en junio era el noveno puesto (11,2%) para los españoles.

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