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Josep Borrell culpa a Kosovo de la nueva escalada con Serbia en la crisis de las matrículas

Finaliza la prórroga que Belgrado y Prístina habían pactado para evitar que se avivara la tensión en los Balcanes occidentales

Manuel V. Gómez
Josep Borrell
Desde la izquierda: el presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, el alto representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell, el enviado de la UE para el diálogo de Kosovo y Serbia, Miroslav Lajcak, y el primer ministro de Kosovo, Albin Kurti, este lunes en Bruselas.DPA vía Europa Press (DPA vía Europa Press)

Las difíciles relaciones entre Kosovo y Serbia amenazan con volver a tensarse. La reunión que los mandatarios de ambos países han mantenido en Bruselas con la intermediación del alto representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell, ha fracasado. La nueva prórroga en la crisis de las matrículas alcanzada este pasado verano finaliza en la madrugada del lunes a martes y no ha sido posible prorrogarla. “Presentamos una propuesta que podría haber evitado esta situación de riesgo. El presidente [serbio Aleksandar] Vucic la aceptó, pero, lamentablemente, el primer ministro [kosovar Albin] Kurti no lo hizo”, resumió Borrell al término de ocho horas de reuniones, según el mismo ha detallado con un tono en que se mezclaba la dureza y el pesimismo ante la situación.

Ya hace más de un año que estalló la crisis de las matrículas entre Prístina y Belgrado, último capítulo de una dificilísima y violenta relación en las últimas décadas. Este episodio empezó cuando el Gobierno de Kosovo, que declaró su independencia unilateral de Serbia en 2008, decidió exigir que se dejaran de usar matrículas expedidas por Belgrado en los vehículos de la minoría serbokosovar. La tensión, que se desató en septiembre de 2021 y en agosto de este año a raíz de esta decisión, se sorteó con sendas prórrogas para la entrada en vigor. La última finaliza y Kurti, consciente de que la coyuntura internacional no favorece a Serbia, tradicional aliado de Rusia, no está dispuesto a firmar otra sin contrapartidas.

La falta de acuerdo vuelve a amenazar con una nueva escalada de tensión: “La disputa por las matrículas se ha agudizado. Kosovo había decidido comenzar a imponer multas a partir del 22 de noviembre, es decir, a medianoche de esta noche, para quienes no hayan vuelto a registrar sus vehículos”, ha dicho Borrell. “Como consecuencia, los serbios de Kosovo se han retirado de las instituciones en el norte de Kosovo. Y eso significa que alrededor de 600 policías han dejado sus uniformes. También han dimitido jueces y personal de la administración local. Actualmente, menos de 50 policías albanokosovares están en las comisarías de la región, lo que sin duda no es suficiente”, ha resumido el jefe de la diplomacia europea.

Todo esto ha provocado la reunión de urgencia de este lunes que ha acabado en fracaso. “Hay una responsabilidad importante [del lado de ambos líderes] por el fracaso de las conversaciones de hoy y por cualquier escalada y violencia que pueda ocurrir sobre el terreno en los días siguientes”, ha advertido Borrell. A continuación, ha reclamado “que Kosovo suspenda de inmediato otras etapas relacionadas con la reinscripción de vehículos en el norte de Kosovo”. Y ha reclamado a Serbia que suspenda la emisión de nuevas placas de matrícula con las denominaciones de las ciudades de Kosovo.

A esta llamada se ha sumado el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, que después del maratón de reuniones de este lunes, ha mantenido una conversación telefónica con Borrell. “Decepcionado porque no haya sido posible una solución a la crisis de las matrículas. Ahora es el tiempo de la responsabilidad y las soluciones pragmáticas. La escalada debe evitarse. La KFOR está vigilante”, ha señalado el noruego en Twitter, con una referencia final a la fuerza militar que la Alianza tiene desplegada en el terreno para interponerse entre las dos partes en caso de conflicto. También la UE tiene una misión desplegada en la zona, EULEX.

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También al acabar el encuentro, varios de los responsables políticos de Prístina apuntaban en Twitter que Kosovo habría propuesto dialogar sobre la plataforma presentada por la UE en septiembre, respaldada por Alemania y Francia, que viene a avanzar en el reconocimiento de facto de Kosovo. “Extrañamente, esto fue rechazado”, ha apuntado el embajador kosovar, Agron Bajrami.

Otras fuentes apuntaban que en la reunión Serbia habría puesto como condición que también se avanzara en el desarrollo de los acuerdos alcanzados hace 10 años, como la constitución de una mancomunidad de municipios en la zona serbokosovar. Esto habría sido rechazado por Prístina y se habría llegado al bloqueo, según esta versión.

Por su parte, el Servicio de Acción Exterior ha añadido que “cualquier afirmación de que la UE está renunciando a su propuesta de normalización de las relaciones entre Kosovo y Serbia, que cuenta con el apoyo de Alemania, Francia y Estados Unidos, es falsa.” “La UE sigue apoyando plenamente esta propuesta y anima a las partes a que acepten el texto tan pronto como estén dispuestas a demostrar a la comunidad internacional que son capaces de optar por soluciones europeas”, ha añadido.

Traducción realizada con la versión gratuita del traductor www.DeepL.com/Translator


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Sobre la firma

Manuel V. Gómez
Es corresponsal en Bruselas. Ha desarrollado casi toda su carrera en la sección de Economía de EL PAÍS, donde se ha encargado entre 2008 y 2021 de seguir el mercado laboral español, el sistema de pensiones y el diálogo social. Licenciado en Historia por la Universitat de València, en 2006 cursó el master de periodismo UAM/EL PAÍS.

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