Enrique Iglesias enseña a su hija Masha de dos meses
El cantante y su niña bailan en un vídeo difundido por las redes sociales la canción ‘We are young’
Enrique Iglesias ha enseñado a su hija pequeña Masha en un vídeo donde la hace bailar la canción We are young del grupo neoyorquino Fun, en lo que constituye una de las primeras escenas públicas entre padre e hija. El cantante mostró a la niña, la tercera de sus hijos, en una foto obtenida en la sala de partos nada más nacer. Desde entonces no había ninguna imagen de ella.
El pasado 30 de enero, Enrique Iglesias y Anna Kournikova se convertían en padres por tercera vez. Apenas trascendieron detalles del nacimiento. Iglesias desveló el nombre en una entrevista con la revista People, con la que charló con motivo de la gira conjunta que iba a realizar junto al puertorriqueño Ricky Martin y que ha quedado aplazada por el coronavirus.
Además de hablar de la pequeña Masha, el cantante español afincado en Miami contó cómo fue la llegada de la pequeña a la familia y su integración con sus hermanos mayores, Lucy y Nicholas, de dos años. “La verdad es que la adoran”, relató Iglesias. “Hay una diferencia de dos años, por lo que me daba un poco de miedo. Era cómo: ‘A ver cómo reaccionan...’ Y además tenemos dos perros, por lo que la casa es caótica. Cuando llegamos a casa con Masha la primera vez, fue como: 'Vamos a ver cómo van a reaccionar todos...", contaba a la revista hace unas semanas.
Recientemente Isabel Preysler, madre del cantante comentaba sobre su nieta: “La hija de Enrique y Anna es una preciosidad, muy rubita y con los ojos azules”. Y añadió: “Enrique lo ha mantenido en secreto y lo ha conseguido. No se lo ha dicho a nadie casi hasta el final. Yo tampoco lo he comentado porque él me lo pidió. Le gusta mantener su vida lo más privada posible”, declaró en relación al hermetismo con el que Iglesias maneja su vida familiar.
Enrique Iglesias es muy reservado acerca de su vida privada. Él y Kournikova viven desde hace años en Bay Point, una de las islas más lujosas y exclusivas de la bahía de Miami. Es casi imposible acceder a su blindada urbanización, y cuando los paparazis se enteraron de que la tenista podría estar embarazada, se hicieron pasar por conductores de Uber para poder colarse en la zona. La casa tiene un atraque propio y allí el cantante fondea el barco, con el que sale a navegar al atardecer. En uno de esos paseos, de embarcación a embarcación, se realizó la primera y única foto del segundo embarazo de Anna Kournikova. Unos días después, el bebé llegaba al mundo en el hospital de South Miami, donde la tenista dispuso de toda un ala para blindar su privacidad.
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