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Claves de la ‘huelga de los 10 minutos’ de Madrid: los médicos de la Atención Primaria reclaman más tiempo por paciente

El sindicato Amyts llama a casi 5.000 doctores de familia y pediatras a paros indefinidos por la acuciante falta de plantilla, que en muchos casos les impide dedicar más de tres minutos a cada enfermo

Médicos de Atención Primaria, durante la concentración de este lunes frente a la Gerencia de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid.
Médicos de Atención Primaria, durante la concentración de este lunes frente a la Gerencia de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid.MOeh Atitar
Victoria Torres Benayas

Segunda huelga sanitaria en Madrid en lo que va de mes. Tras los paros en las urgencias extrahospitalarias, que se iniciaron el pasado 7 de noviembre y terminaron 10 días después tras alcanzarse un acuerdo, desde este lunes los que cuelgan las batas son la base y primer eslabón de la cadena, los facultativos de Atención Primaria. Son 4.246 médicos de familia y 715 pediatras de los 430 centros de salud de la comunidad, convocados por la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts), al igual que la primera. También, como en la anterior, tiene un carácter indefinido. De momento, ha habido dos reuniones entre el comité de huelga y la Consejería de Sanidad sin que se haya logrado desencallar el conflicto. ¿Qué piden estos profesionales? ¿Por qué estalla ahora el conflicto? ¿Cuáles son los servicios mínimos? ¿Qué tiene que decir el Gobierno regional? Estas son las claves del conflicto:

Cuál es el problema

La raíz no es otra que “la acuciante falta de médicos”, explica una de las portavoces de Amyts, Isabel Vázquez. “Calculamos que el 20% de las plazas está sin cubrir por las jubilaciones y la falta de nuevas contrataciones”, denuncia. De estar al 100%, con unos de 1.200 a 1.300 profesionales más, “la situación no sería tan mala, pero tampoco buena, porque las plantillas no están correctamente dimensionadas a la población que atienden ni contemplan el suficiente número de profesionales para cubrir las ausencias”. Esta carencia de médicos hace, según sus cálculos, que haya 600.000 madrileños sin un profesional asignado y 212.000 niños sin pediatra, que los médicos en activo se tienen que repartir.

La tasa de médicos de Primaria por cada 1.000 habitantes de Madrid es la segunda más baja del país, 0,7. Aunque en todas las comunidades los profesionales denuncian una falta de efectivos, el conjunto del sistema ha aumentado sus plazas de Primaria en un 36%, mientras que en Madrid ha caído un 2% desde 2018, según el Ministerio de Sanidad. La demora para lograr una consulta, según los médicos, varía desde los 4-5 días hasta 15-20 en función del centro ―la medida, según la consejería, fue de 5,4 días en 2021 y en el peor centro subió a 12 días―.

El asunto de fondo es cuánto y dónde se invierte en sanidad. Madrid es la segunda comunidad con menor gasto sanitario por habitante, 1.521,8 euros, y de esta cantidad, 162,2 se destinó a Primaria, un 10,7%, según el ministerio. Este es el porcentaje más bajo registrado en Madrid en los últimos 20 años. Por contra, es la región que más invierte en los hospitales, 69,7%, un modelo que deja en los huesos a la base de la pirámide. Aunque los Presupuestos autonómicos para 2023 prevén destinar un 25% del gasto sanitario a Atención Primaria, la Asociación en Defensa de la Sanidad Pública asegura que las cifras “están maquilladas”: casi la mitad irá a gasto farmacéutico.

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“Ni mucho menos”, responde tajante Vázquez. “Llevamos desde cinco, seis, siete años antes denunciando que la situación es insostenible y la covid no hizo más que evidenciar de forma flagrante las carencias de personal”, asegura la médico, que habla de casos inadmisibles como pediatras que cubren tres cupos completos por el precio de uno. El conflicto estalla ahora “porque el deterioro es tal que se ha alcanzado un punto de no retorno”, ven “pacientes a granel”, sostiene. “La gota que ha colmado el vaso ha sido el caos en las urgencias extrahospitalarias”, añade, al tiempo que reconoce que, con la manifestación del domingo, se sintieron, al fin, “muy respaldados por la sociedad”.

¿No se contrata a más médicos porque no hay?

No es cierto que no haya médicos en Madrid, como ha dicho el Gobierno regional. A finales de marzo, CC OO denunció el despido de “1.298 profesionales en Atención Primaria” en la región, un 77% de los contratos de refuerzo covid. En total, el sistema sanitario madrileño perdió 6.000 médicos, enfermeros, auxiliares, celadores o técnicos de laboratorio.

A los médicos que había, que podían haber pasado a engrosar las plantillas de los ambulatorios, se los despidió, y a los recién formados, se los espanta con contratos temporales, bajos salarios y condiciones laborales draconianas. Los médicos Internos Residentes (MIR) que se forman aquí no quieren trabajar en Madrid: en los últimos dos años han terminado la residencia 443 especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria y, de ellos, tan solo 37 aceptaron los contratos que les ofrecía la Consejería de Sanidad; en el caso de los pediatras, de 155 que han terminado, tan solo se quedaron seis. “Lo que más nos duele es que nuestros propios residentes, después de formarlos, no se queden en nuestros centros de salud”, constata la portavoz del sindicato.

Sanidad alega que la posibilidad de nuevas contrataciones “está contemplada” en el Plan de Mejora de Atención Primaria, puesto en marcha en octubre de 2021, y ha recordado otras medidas como la contratación de extracomunitarios, vía Ley Ómnibus ―que eximirá del requisito de la nacionalidad española para contratar a extracomunitarios― o vía Oferta Pública de Empleo. Según sus datos, hay 189 médicos de Primaria más de 2019 a 2022.

Qué piden los médicos y qué responde Sanidad

“Tiempo para atender a los pacientes”, sentencia Vázquez. Mientras los organismos internacionales recomiendan un máximo de 20/25 al día, en Madrid tienen de media 50, incluso 60-70, lo que se traduce en que cada cita no llega “ni a los tres minutos”, cuando en países como Irlanda son 15. Ante esta situación, reclaman limitar a 30 las citas por día y a 21 en pediatría, poder dedicarles 10 minutos, y que se cubran todas las plazas.

También piden una única agenda por médico y sin pacientes de otros, la consolidación de horarios que permitan la conciliación, mejoras retributivas que hagan atractiva la Atención Primaria, agilizar los procesos selectivos, que se aborde el problema de los médicos de familia obligados a ejercer de pediatras sin serlo y que se reduzca la burocracia. Su objetivo final es “salvar la Atención Primaria”. “Si se derrumba, todo el sistema se cae”, advierte Amyts.

El Gobierno regional asegura haber mostrado “la mano tendida” para avanzar en mejoras organizativas, unos avances que “ya se vienen desarrollando” en el Plan de Mejora, dotado con 200 millones de euros. Amyts rechazó este plan en la Mesa Sectorial porque “no se traduce en soluciones reales para los centros de salud”.

Cuáles son los servicios mínimos

A diferencia de otras ocasiones, “no hay un porcentaje”, detalla Amyts, sino que depende de las dimensiones del centro. Los servicios mínimos para ambulatorios con cuatro o más doctores, los más grandes y numerosos, son de dos médicos de familia y un pediatra por turno. En los que tienen menos de cuatro facultativos habrá un médico y un pediatra por turno y, si no hubiera pediatra, se sustituirá por otro médico de familia. El sindicato se declara “muy sorprendido” por el cambio de estrategia de la Comunidad, que suele fijar mínimos muy elevados, incluso del 100% como en la huelga en las urgencias. Temen el colapso de los centros más grandes y esto ponga a los ciudadanos en su contra.

En qué punto está la negociación

Tras el primer día de paros, calificados de “históricos” por los convocantes y en los que la consejería cifró el seguimiento en un 31% en el turno de la mañana y en un 29% en el de la tarde, Sanidad citó a Amyts a la mesa de negociación. Su propuesta son 10 minutos por paciente, pero con 35 al día, y la propia Ayuso avanzó una oferta a los huelguistas: medidas contra los contratos temporales que encadenan los médicos, un sistema que racionalice las citas para evitar extensas horas de trabajo, pago de horas extraordinarias e intentar, con incentivos, retener a los MIR. Todas son promesas antiguas que ya sirvieron al Gobierno de Ayuso para convencer a los médicos hace dos años para que desconvocaran otra huelga en Atención Primaria.

Tras cinco horas y media de reunión, ambas partes se emplazaron a seguir hablando al día siguiente, pero de aquella cita salió un no de los médicos al plan de Ayuso. Necesitan más compromiso, más presupuesto, más doctores y más seguridad de que las promesas se van a cumplir de verdad. Amyts confía en que la huelga no sea larga “por el bien de todos”, pero promete “aguantar lo que haga falta para llegar hasta el final”. “Esperamos que negocien de verdad, no queremos humo”, concluye la portavoz.

Los pronunciamientos de Ayuso

En el primer día de huelga, la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, pidió la desconvocatoria ante el incremento de casos de gripe y bronquiolitis, que podrían saturar los hospitales. Ayuso dijo que no es el “momento” de hacer una huelga porque podría ocasionar un perjuicio “mayor” a los ciudadanos. Más Madrid, PSOE y Unidas Podemos consideraron “graves” estas palabras y lamentaron que la presidenta, una vez más, acuse a los sanitarios de perjudicar la salud de los ciudadanos.

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Sobre la firma

Victoria Torres Benayas
Redactora de la sección de Madrid, también cubre la información meteorológica. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Navarra, cursó el máster Relaciones Internacionales y los países del Sur en la UCM. En EL PAÍS desde el año 2000, donde ha pasado por portada web, última hora y redes, además de ser profesora de su escuela entre 2007 y 2014.

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