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Ayuso desdeña ahora a Consuelo Ordóñez, la víctima de ETA que alertó de los exetarras en las listas de Bildu

“No sé si tiene problemas personales con el PP”, dice la presidenta madrileña sobre la líder de Covite, quien la había criticado por decir que la banda sigue viva

La presidenta madrileña y candidata del PP a la reelección, Isabel Díaz Ayuso, durante desayuno informativo este jueves en Madrid. Foto: CHEMA MOYA (EFE) | Vídeo: RNE
Juan José Mateo

La presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata a la reelección por el PP, Isabel Díaz Ayuso, ha insistido este viernes en exigir a su partido que explore vías para ilegalizar a Bildu, pese a que el líder de la formación, Alberto Núñez Feijóo, ya ha descartado esa posibilidad y ha dado por zanjado el debate. “No es un pulso al PP, es un pulso a Bildu”, ha dicho Ayuso durante una entrevista en RNE, en la que también ha respondido con desdén a las críticas vertidas contra ella por Consuelo Ordóñez, presidenta del Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite). Ordóñez, que fue precisamente quien denunció hace una semana la presencia de 44 condenados por pertenecer a ETA en las listas electorales de Bildu, había pedido a Ayuso el jueves que dejara de insistir en que la banda terrorista “sigue viva”, porque lo considera una “banalización” que perjudica a las víctimas. La presidenta madrileña ha ignorado esa petición y ha añadido, refiriéndose a la dirigente de Covite: “Es que ella… no sé si tiene problemas personales con el PP ya desde hace años”.

“No es un pulso al PP, ni mucho menos a mi presidente, es un pulso a Bildu. Y no es venganza, es justicia”, ha señalado la líder conservadora, que el pasado domingo mencionó al hermano de la presidenta de Covite, Gregorio Ordoñez, asesinado por ETA, en un mitin en Pozuelo, donde le puso como ejemplo del presidente que el País Vasco había perdido por culpa de los terroristas. “Cuando el discurso de Pedro Sánchez, Bildu y Podemos van todos en la misma línea, nos debemos preocupar”, ha seguido. “Simplemente, pido que se revise. No digo que se ilegalice un partido porque me caiga mal. Eso no es así”.

La presidenta madrileña ha dicho que no necesita “absolutamente” el tema de EH-Bildu “para nada” en campaña, pero ha insistido en que no dejará de referirse a ello: “Sería ir contra mi propia filiación al PP, mentir contra los últimos 20 años y los discursos que he mantenido siempre. Me veo obligada a defender este discurso porque me afilié al PP por esto”, ha subrayado. Sin embargo, el 11 de marzo de 2019, Ayuso, que se afilió en 2005, tuiteó: “Me afilié al PP tras el 11-M. Con la llegada de Zapatero, España dejó de ser referente internacional y nuestro país fue profundamente dividido. Supuso un antes y un después en política”.

Posteriormente, y durante un mitin en Parla, la presidenta regional ha vuelto a referirse a los diferentes puntos de vista con los que ella y su jefe de filas, afrontan la polémica. “Buscan una discrepancia en el PP, usan una polémica que ellos mismos alimentan para no explicar que los mensajes del gobierno y de Bildu van en la misma dirección, se ayudan los unos a los otros”, ha dicho. “Que expliquen esa connivencia y no cómo nuestro partido está buscando soluciones”.

En la entrevista en RNE, Ayuso no ha hecho ningún tipo de autocrítica ante la petición de varias víctimas del terrorismo, que el jueves le reclamaron que deje de usar a ETA en la campaña electoral. Consuelo Ordóñez había criticado a Ayuso la víspera por decir que “ETA está viva”, y ya lo hizo en febrero cuando la dirigente madrileña espetó a los diputados regionales del PSOE: “Que les vote Txapote”, en referencia al asesino de Miguel Ángel Blanco. Consuelo Ordóñez es la hermana de Gregorio Ordóñez, quien en 1995, siendo concejal en San Sebastián, se convirtió en el primer cargo público del PP asesinado por ETA. Aquel fue el inicio de una campaña homicida que la banda bautizó como “la socialización del sufrimiento” y que acabó con la vida de políticos e intelectuales constitucionalistas, periodistas, jueces o ertzainas, además de policías, guardias civiles y militares que hasta entonces habían sido sus principales víctimas.

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La Fiscalía de la Audiencia Nacional archivó hace dos días la denuncia presentada por la asociación de víctimas Dignidad y Justicia por la inclusión en las listas de más de 40 candidatos condenados por terrorismo etarra —siete de ellos con delitos de sangre renunciarán a tomar posesión de su acta, según aseguraron el martes—. Al día siguiente, Feijóo zanjó el debate sobre la ilegalización de Bildu. Según fuentes de su entorno, Feijóo considera que esta reclamación es un “brindis”, además de un planteamiento poco serio, toda vez que ETA abandonó la violencia hace 12 años y anunció su disolución hace cinco.

El jueves por la tarde, Feijóo lo dejó claro en un mitin: “Hemos vencido entre todos al terrorismo sin necesidad de conocer al señor Sánchez en política nunca”. Por la mañana, el portavoz de campaña del PP, Borja Sémper, aseguró que la formación abertzale “no incumple la ley de partidos” y, por lo tanto, el PP acepta “con naturalidad democrática que esté en las instituciones”. Y la portavoz del grupo parlamentario, Cuca Gamarra, confirmó que “los servicios jurídicos” del PP han descartado la opción de que se pueda ilegalizar a Bildu.

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Sobre la firma

Juan José Mateo
Es redactor de la sección de Madrid y está especializado en información política. Trabaja en el EL PAÍS desde 2005. Es licenciado en Historia por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Periodismo por la Escuela UAM / EL PAÍS.

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