Juan Carlos I aterriza en Abu Dabi tras finalizar su segunda visita a España

Juan Carlos I, rey emérito de España, ha abandonado esta mañana España rumbo a su casa en Abu Dabi, en donde ha aterrizado a las 17.16, hora peninsular Española. El rey emérito ha pasado unos días de amigos y regatas en Sanxenxo (Pontevedra) y se ha sometido a una revisión odontológica la clínica del doctor Eduardo Anitua, en Vitoria. Este martes por la mañana temprano ha abandonado el centro sanitario, se ha trasladado al aeropuerto vitoriano de Foronda, ha embarcado en el jet privado de lujo en el que llegó a España y ha despegado, sobre las 10.45, con rumbo hacia Abu Dabi para concluir la visita de seis días del padre de Felipe VI, la segunda desde que abandonó el país mientras era investigado por su fortuna oculta en el extranjero.

El rey emérito, de 85 años, llegó a Vitoria pasadas las siete de la tarde del domingo procedente de Galicia, adonde viajó el miércoles para participar en las regatas que se han disputado en Sanxenxo (Pontevedra), en las que finalmente no pudo tomar parte debido a las condiciones meteorológicas desfavorables. La presencia del anterior jefe del Estado en la localidad gallega ha sido discreta y, más allá de los desplazamientos para ir al muelle donde amarra el Bribón, prácticamente no ha sido visto por el municipio.

En la capital alavesa ha permanecido desde el domingo alojado en la clínica del doctor Anitua. Poco antes de las diez menos diez de la mañana se ha subido en una furgoneta Mercedes azul en dirección al aeropuerto de Foronda para abandonar en un vuelo privado la capital vasca. La discreción durante la estancia de Juan Carlos I en Vitoria ha sido total. En los aledaños del centro sanitario no se han observado medidas de seguridad ni había presencia policial, salvo las salidas que uno de los asistentes que acompaña al monarca ha realizado por el exterior del edificio, donde se habían congregado una veintena de informadores.

Juan Carlos I ha elegido para tratarse uno de los centros médicos y de investigación más destacados de España, dotado con laboratorios de prótesis y de quirófanos de última generación y en la vanguardia de la producción científica en el campo de la biotecnología. Durante el lunes, cuando los periodistas y fotógrafos esperaron al rey emérito a las puertas de la clínica, sin éxito, por lo que se especula que ha permanecido en su interior desde su llegada a la ciudad, se vio a su yerno, Iñaki Urdangarin, que se encuentra en trámites de divorcio de la infanta Cristina, circulando en bicicleta por la capital alavesa, informa Europa Press.

La visita ha estado marcada por la discreción, con un tono muy distinto de la anterior, hace un año también en Sanxenxo, donde hubo un enorme revuelo mediático y una gran exhibición pública. En esta ocasión tampoco ha visitado ni ha recibido la visita de su hijo. Se esperan próximos viajes a España y Europa, muchos de ellos motivados por su pasión por las regatas. De hecho, deberá entrenarse con la tripulación del Bribón en más ocasiones, y la oportunidad la brindan las regatas que, en el marco de la copa de España de la clase 6m, se celebrarán en los próximos meses en el Real Club Náutico de Sanxenxo, del que es presidente su íntimo amigo Pedro Campos, en cuya casa de Sanxenxo se ha alojado don Juan Carlos.

En concreto, estas regatas están programadas para los días 22 y 23 de abril, 19 al 21 de mayo, 9 al 11 de junio y 7 al 9 de julio. Ya en agosto, Juan Carlos I, junto al resto de la tripulación del Bribón, se trasladaría a Cowes, en la isla de Wight, para entrenar en el propio escenario del campeonato del mundo, previsto entre el 31 de agosto y el 8 de septiembre. Sanxenxo es el lugar idóneo para prepararse: además de ser la base del Bribón y de toda su tripulación, reúne condiciones similares a las de la isla británica ubicada al sur de Southampton.