La propuesta de Feijóo para que gobierne la lista más votada afectaría a una docena de grandes ayuntamientos

La propuesta del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, presentada este lunes, para que a partir de las próximas elecciones municipales de mayo sea proclamado el alcalde o alcaldesa más votado, apenas habría tenido influencia en la configuración de los ayuntamientos que salieron de las urnas en las elecciones municipales de mayo de 2019. De las 82 ciudades que tienen más de 100.000 habitantes o son capitales provinciales o regionales, en tan solo 14 la alcaldía recae en manos de una formación distinta a la más votada en aquellos comicios, aunque en ese grupo están las más dos pobladas del país, Madrid y Barcelona. Además, de haber prosperado la idea del PP en las municipales de hace cuatro años, el partido conservador habría resultado perjudicado en dos de las mayores plazas.

Así, en Madrid (3,3 millones de habitantes), cuya alcaldía está en manos del popular José Luis Martínez-Almeida, la fuerza más votada en 2019 fue Más Madrid, que obtuvo 19 concejales, frente a solo 15 del PP, segunda mayor formación. Con la propuesta de Feijóo también le habría ido mal a su compañero de filas Jorge Azcón, alcalde de Zaragoza (675.000 habitantes): el PP cuenta con 8 ediles frente a 10 del PSOE, la candidatura más votada.

En Barcelona (1,6 millones de habitantes) ganó ERC, con 10 ediles, si bien la alcaldesa, Ada Colau, es de Barcelona en Comú, que consiguió también 10, pero con un porcentaje inferior (20,71%) a los republicanos (21,35%).

Para encontrar otros casos hay que irse mucho más abajo en la lista de los mayores municipios de España. En A Coruña (245.000 habitantes) empataron a escaños el PP y el PSOE, pero en número de votos los primeros fueron los populares, con el 30,34% de los sufragios, frente al 30,02% de los socialistas, una diferencia de solo 399 sufragios. Con todo, la alcaldesa del 18º municipio más poblado de España es la socialista Inés Rey.

En Badalona (Barcelona, 223.000 habitantes), la alcaldía recae actualmente en Rubén Guijarro, del PSC, pero el partido ganador fue el PP, con 11 concejales, seguido de ERC (7) y, en tercer lugar, el PSC (6).

En Cartagena (Región de Murcia, 216.000 habitantes), la alcaldesa, Noelia Arroyo (PP) representa al segundo partido más votado, con 7 concejales, frente a los 8 de Movimiento Ciudadano de Cartagena. En La Laguna (Tenerife, 158.000 habitantes) el bastón de mando lo tiene el socialista Luis Yeray Gutiérrez, con 7 concejales, pero el ganador fue Coalición Canaria, con dos más.

En Tarragona (135.000 habitantes) el PSC empató en concejales con ERC (7 ediles cada uno), pero los socialistas se alzaron con el 23,43% de los votos frente al 22,62% de los republicanos, que, sin embargo, ostentan la alcaldía (Pau Ricomà).

En Alcobendas (Madrid, 116.000 habitantes) el alcalde, Aitor Retolaza, es de Ciudadanos, pero su formación fue la tercera en las elecciones municipales de hace cuatro años, con solo 5 concejales, por detrás de los 10 del PP y los 9 del PSOE. También obtuvo el tercer puesto Democracia Orensana en Ourense (104.000 habitantes), detrás del PSOE (9 ediles) y del PP (7). Con este último, el partido del alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, empató a ediles, pero consiguió 569 votos menos. En otra capital gallega, Lugo (97.000 habitantes), gobierna la socialista Lara Méndez, cuyo partido obtuvo 8 puestos frente a 10 de los ganadores, el PP.

En Palencia (77.000 habitantes) gobierna Ciudadanos (Mario Simón), pero su formación fue la tercera, con solo 3 concejales, mientras que el PSOE tuvo 11 y el PP, 9. Y en otra localidad de similar tamaño, Ciudad Real (75.000 habitantes), manda un primer edil de Ciudadanos, con 3 apoyos de su partido, frente a 10 del PSOE y 9 del PP.

¿Qué pasaría con los gobiernos autonómicos?

Aunque la propuesta de Feijóo va dirigida solo a los ganadores en las elecciones municipales, de aplicarse a los gobiernos autonómicos habría perjudicado a su partido en el caso de la Región de Murcia, gobernada por el popular Fernando López Miras, a pesar de que su formación obtuvo menos votos y diputados regionales (16) que los socialistas (17). En Navarra, el PSOE no habría tenido el poder, actualmente en manos de la socialista María Chivite, que obtuvo menos sufragios que la coalición vencedora, Navarra Suma.

En la ciudad autónoma de Melilla gobierna un exmiembro de Ciudadanos, Eduardo de Castro, que concurrió por esas siglas en las elecciones autonómicas de 2019. Su formación obtuvo un único escaño en la Asamblea, el suyo, y resultó la menos votada de entre las que consiguieron representación, tras el PP, Coalición por Melilla, PSOE y Vox.

En Castilla y León ganó el PSOE en 2019, pero gobernó el PP, que mantuvo el poder tras las elecciones autonómicas de febrero de 2022; entonces sí fue la fuerza más votada. En 2021 en los comicios de Cataluña, el PSC superó a la segunda fuerza, ERC, por 49.251 votos, y empataron en escaños, pero gobiernan los republicanos.