_
_
_
_
_

Bayern y PSG se afilan para su gran duelo en la Champions

El cuadro muniqués golea al Unión Berlín en la reaparición de Sadio Mané mientras Mbappé y Messi conectan para anotar tres goles de récords que valieron un sólido triunfo en Marsella

Mbappé y Messi celebran uno de los goles del PSG. El francés alcanzó la cifra de 200 goles en el conjunto parisino, mientras que Messi llegó a los 700 entre Barça y PSG.
Mbappé y Messi celebran uno de los goles del PSG. El francés alcanzó la cifra de 200 goles en el conjunto parisino, mientras que Messi llegó a los 700 entre Barça y PSG.DPA vía Europa Press (DPA vía Europa Press)

Bayern y París Saint-Germain se afilan de cara al reto continental que les enfrenta en la Champions. El día 8 de marzo se cruzarán en Múnich el campeón galo y el alemán, con ventaja local tras el gol anotado por Coman en la ida en el Parque de los Príncipes. Mientras tanto se hacen fuertes en las competiciones domésticas. El PSG solventó con suficiencia la visita del dentista que siempre le supone acudir al Vélodrome de Marsella. Dos conexiones entre Mbappé y Messi, con gol y asistencia para cada uno, laminaron al Olympique en dos chispazos antes del descanso que penalizaron un plan arriesgado que dejó latifundios a la espalda de la zaga. Mbappé los explotó, de nuevo en el inicio de la segunda parte, para rubricar el repaso (0-3) tras otro pase delicioso del argentino y convertirse en el máximo realizador de la historia del PSG con la redonda cifra de 200 goles. Atrás queda Cavani. Messi, por su parte, convirtió su gol 700 entre el Barcelona y el conjunto parisino.

El triunfo es oro para los parisinos en un partido fronterizo en el que la derrota le dejaba apenas dos puntos por encima del rival y la victoria le distancia ahora en ocho. A diez ya están Mónaco y Lens. Esta vez Luis Campos, el director deportivo, repartió abrazos a pie de césped nada más finalizar el partido. “Estamos consolidando una línea defensiva sólida para dar tranquilidad a los jugadores de arriba”, valoró Sergio Ramos, excelente como líder de la defensa del PSG.

En Alemania, despistado como estaba en la Bundesliga tras sumar 9 puntos de 18 posibles en las últimas seis jornadas, el Bayern recibió este domingo al Unión Berlín con la necesidad de ganar para recuperar el liderato en el que horas antes se había instalado el Borussia Dortmund, vencedor en Hoffenheim. La jornada había comenzado en un inusitado escenario de igualdad, con seis equipos apenas separados por cinco puntos y un triple empate en cabeza con el cuadro berlinés como un convidado inesperado. El Bayern resolvió el envite como solía, a la tremenda (3-0): en el último cuarto de hora antes del descanso anotó tres goles y convirtió la segunda parte en un trámite en el que encontró espacio para reactivar a Sadio Mané, que reapareció después de tres meses y medio lesionado.

La superioridad del Bayern para nada remitió a la igualdad en la clasificación. El campeón bávaro jugó en campo contrario, juntó pases, recuperó balones, los centró y los remató. En esas lides se exhibió el veterano camerunés Choupo-Moting, un bregador del área al que la partida de Lewandowski y los problemas de Mané le han hecho transitar de secundario a protagonista. En el primer rol había dejado un leve rastro de oficio en el París Saint-Germain, que le rescató tras una nefasta campaña en el Stoke City, descenso incluido. De vuelta a la Bundesliga, en la que había edificado su carrera en destinos como Hamburgo, Nuremberg, Mainz y sobre todo Schalke 04 vive una segunda juventud. En doce de los últimos partidos que ha jugado dejó su sello goleador en ocho. Al Unión Berlín le marcó el gol que abrió el triunfo del Bayern, un frentazo de nueve clásico tras elevarse sobre su marcador.

Vivir como delantero en el Bayern es una gozada para un carpanta del gol porque la nutrición jamás falla. Müller aún tiene batería, Musiala es una delicia y si se va Coman entra Gnabry. Ahora llega además Mané. Nagelsmann prepara el arsenal para acabar de dinamitar al PSG, que se abriga con Mbappé y Messi mientras aguarda noticias sobre el tobillo dañado de Neymar. El que seguro que no estará en la cita de Múnich es el defensor Kimpembe, que dejó el césped del Vélodrome en camilla con una lesión que no tenía buena pinta.

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_