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Errejón lo apuesta todo a Carmena

El candidato intenta mimetizarse con la alcaldesa, apela al 15-M y aguanta el pulso a la dirección de Podemos en la negociación de la lista conjunta con IU

Íñigo Errejón, en una imagen de archivo.
Íñigo Errejón, en una imagen de archivo. FERNANDO VILLAR (EFE)

"Dormíamos, despertamos". En diciembre, Íñigo Errejón se pasea dos veces por el corazón madrileño del 15-M. En una ocasión pisa la Puerta del Sol para respaldar al Ayuntamiento de Manuela Carmena en la colocación de una placa a la que se opone la Comunidad, y que conmemora el movimiento ciudadano que cambió España en 2011. En la otra, graba su primer vídeo como candidato a la presidencia de la región sin mencionar a Podemos ni mostrar su logo. Esos dos episodios resumen por qué el aspirante rechaza un mes después el preacuerdo de Podemos e IU para fundirse en una lista electoral en la que Sol Sánchez sea su número dos. Errejón —que está a favor de esa suma, pero no la considera cerrada— lo apuesta todo a que su proyecto se mimetice con el de Carmena y a que supere las siglas de los partidos de izquierdas para llegar a un electorado más amplio.

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"El nombre, las siglas, la imagen que quiere Íñigo, es con Carmena", concede un dirigente de Podemos Madrid, roto entre los que apoyan al secretario general regional, Ramón Espinar, y los que siguen al candidato. "El equipo de Íñigo no está de acuerdo con que Sol Sánchez, de IU, sea la número dos de esa lista", sigue. "No quiere un pack Íñigo-IU, quiere un pack Íñigo-Clara Serra [portavoz de Podemos e integrante del equipo de Errejón]".

Pablo Iglesias acabó 2018 como el líder político peor valorado de los cuatro grandes partidos, según el CIS. En paralelo, ese sondeo predijo que Podemos empeoraría su resultado de las últimas elecciones generales si ahora se convocaran de nuevo esos comicios. Inmediatamente, las elecciones andaluzas confirmaron que la coyuntura electoral es negativa para los intereses de esta formación: su suma con IU obtuvo tres diputados menos y se dejó un 32% de los votos cosechados en 2015 por los dos partidos por separado.

"Ahora mismo, en España, y desde luego en Madrid, no hay marca más atractiva que la de Manuela Carmena", opina un representante de Podemos vinculado al errejonismo. "Cualquiera querría pegarse a ella", añade sobre el esfuerzo que está haciendo Errejón para que los votantes le identifiquen con la alcaldesa. "En España no hay nadie con la fuerza y el tirón popular que tiene Manuela", sigue. "Y en una Comunidad como la de Madrid, en la que la mitad de la población está en la capital, es normal que hagan tándem".

¿Significa eso que Errejón preferiría ocultar las siglas de Podemos e IU en su candidatura, como hará Carmena si finalmente estos partidos se suman a la plataforma de Más Madrid?

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En una entrevista con la agencia Efe, el dirigente de la formación morada expresó su convicción de que formaciones como IU o Equo "tienen que estar y van a estar" y que no tiene "preferencias 'a priori" sobre la forma de "aterrizar" esa unión ni sobre el nombre de la candidatura. "La forma en la que estemos más cómodos", añadió sobre la posibilidad de replicar en Madrid la fórmula de la confluencia andaluza, donde el nombre Adelante Andalucía ocultó los de Podemos e IU.

Desencuentro interno

No obstante, el margen de maniobra del candidato depende de la dirección regional y de la nacional. Estas actúan en sintonía. Y oficialmente aceptan el preacuerdo que permitiría a Sánchez ser la número dos, y a IU reservarse el 25% de los puestos de la lista.

"En Madrid parece que ha habido un acuerdo generoso con las fuerzas hermanas del espacio del cambio", afirmó este martes el secretario de organización nacional de Podemos, Pablo Echenique, dando por hecho que Errejón acepta los términos de un acuerdo que su equipo no da por cerrado. "Todo apunta a que ese acuerdo transmite la unidad que la gente está esperando de las diferentes formaciones políticas y a lo mejor puede haber algún fleco que atar, respecto a algún municipio", añadió, en referencia a las dificultades que las dos formaciones están encontrando para unirse al proyecto de Carmena en la capital, y para formar listas conjuntas en otras circunscripciones. Y subrayó: "Celebrarlo desde la dirección estatal".

Nada refleja mejor que esas declaraciones la distancia que separa a Errejón de la dirección de Iglesias. La discrepancia nuclear sobre la estrategia del partido que separó a los dos fundadores de Podemos se ha reproducido ahora en Madrid con Espinar, el secretario general. Y ese desencuentro aumenta los acentos personales que introduce Errejón en el discurso de Podemos.

Primero, la apuesta por ampliar su base electoral centrando su propuesta en el pulso de "los de arriba y los de abajo" y no de la izquierda contra la derecha. Segundo, el planteamiento de prometer "justicia social, orden y protección". Y tercero, la firme decisión de vincularse a Carmena por encima de todo.

El precedente de Alberto Garzón en la lista del Congreso

Las discrepancias entre la dirección de Podemos y el equipo de Íñigo Errejón, su candidato regional, por la lista conjunta que este partido negocia con IU continuaron este martes. Representantes de la formación avanzaron que el aspirante a la presidencia de la Comunidad había pedido que un independiente sustituyera a Sol Sánchez (IU) como número dos, extremo que negaron los asesores de Errejón. El equipo del candidato explica su sorpresa por el puesto de Sánchez, que no veta, con dos datos.

Alberto Garzón, el líder nacional de IU, fue el número cinco en la lista por Madrid cuando su partido y Podemos decidieron concurrir conjuntamente a las elecciones generales de 2016. Solo unos meses antes, su formación había logrado dos diputados en los comicios de 2015, tras las que no fue posible formar gobierno, por lo que hubo que repetirlas. Sin embargo, Sánchez lograría una mejor posición —número dos— pese a que en las elecciones autonómicas precedentes IU no logró ningún diputado.

Además, el preacuerdo cerrado entre los dirigentes de los dos partidos concedería jugosas ventajas a la formación de Garzón, que tendría derecho a un 25% de los puestos de la lista —seis de ellos entre los 30 primeros—.

Si Podemos e IU consiguen superar este escollo, no habrán acabado las negociaciones. Las dos formaciones pretenden incorporar a Equo a su lista, tienen que lograr su integración en el proyecto de Manuela Carmena en la capital, y señalan como principal punto de conflicto la elaboración de listas conjuntas en el resto de municipios de la región.

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