Aparece otra enorme ballena muerta en Nueva York

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Una enorme ballena jorobada apareció en la madrugada del martes en la costa de Nueva York. Este ejemplar macho de unos 12 metros de largo ha dejado boquiabiertos a los vecinos de la localidad de Hempstead, Long Island. “Es la ballena más grande que hemos visto en la última década”, aseguró para medios locales el supervisor de la ciudad, Don Calvin. Con esta ya son 15 las ballenas que han llegado a la costa este de Estados Unidos desde principios de diciembre.

“Tuvimos que mover la ballena a un terreno más alto debido a la marea alta. Tuvimos que traer una grúa pesada. Y los cables se rompían debido al tonelaje que se requería para llevarlo realmente a un terreno más alto, a causa de la marea”, señaló Calvin. “Ver una ballena de ese tamaño tan cerca es impresionante. Pero las circunstancias que lo rodearon, para mí, fueron muy, muy tristes y casi desgarradoras. Algo tan hermoso yaciendo allí”, dijo. “No puedes evitar la curiosidad de la gente y lo entiendo”, añadió en alusión al sinfín de vecinos que se acercó a tomar fotos y cuestionarse lo evidente: ¿Por qué ha pasado esto?

Las autoridades ambientales desconocen aún qué hay detrás de esta misteriosa oleada de muertes entre los mamíferos. Algunos ambientalistas lo achacan al desarrollo de parques eólicos marinos en la zona, aunque aún no hay evidencias. Cindy Ziph, directora de Clean Ocean Action, pidió en declaraciones a la BBC que se iniciara una investigación que aclare lo que está haciendo daño a las ballenas.

La ciudad de Hempstead planea cercar a la ballena para que los funcionarios puedan realizar rápidamente una necropsia, programada inicialmente para este martes. Hace apenas dos semanas, otra ballena de unas 12 toneladas fue encontrada en la costa de Nueva Jersey, con claros signos de haber sido golpeada por un buque.

La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica ha informado de 178 varamientos de ballenas jorobadas en 13 estados del Atlántico desde 2016. La agencia ha calificado esas muertes como un “evento de mortalidad inusual”.