Un coche pequeño con el precio más bajo posible que resuelva el transporte diario en ciudad y gaste lo mínimo. Es lo que ofrecen los cuatro modelos de esta comparativa (Seat Mii, Fiat Panda, Kia Picanto y Tata Vista), que incluyen todo lo fundamental y cuestan en torno a 10.000 euros. Se impone el Seat Mii, que, aunque es el más caro, ofrece una calidad superior.
En esta prueba se enfrentan cuatro coches urbanos de última generación. Miden unos 3,5 metros de largo, medio metro menos que la mayoría de los utilitarios, el tamaño idóneo para aparcar en ciudad. Se han elegido con motores de gasolina –no suelen salir mucho a carretera y son más baratos– y, salvo el Seat, equipan las mecánicas más pequeñas de sus gamas. Además, tienen carrocerías de cinco puertas, las más demandadas y prácticas para el uso urbano.
El Seat Mii, gemelo de los VW Up! y Skoda Citigo, salió a finales de 2011. Aporta un interior bien aprovechado en solo 3,55 metros de largo y, al compartir elementos del Ibiza para reducir costes, tiene una conducción más consistente que sus rivales. Estrena una gama de motores tricilíndricos muy eficientes, solo 999cc, y versiones Ecomotive de bajas emisiones. Y se impone porque corre más y gasta menos que los demás.
Pero sobre todo ofrece una calidad de conjunto superior, con un comportamiento más ágil y aplomado, y un equipo de seguridad con control de estabilidad de serie en toda la gama, algo poco habitual en coches urbanos. Además, puede incluir sofisticaciones como el asistente de frenada en ciudad (240 euros), que para por sí solo a menos de 30 km/h si detecta riesgo de colisión, y el Seat Portable System (250 euros), un módulo con navegador, ordenador de viaje y bluetooth. El Mii se vende en versiones de tres y cinco puertas (300 euros más) con un motor 1.0 gasolina de 60 y 75 CV (desde 9.220 y 9.670 euros).
El Kia Picanto, segundo en la prueba, destaca por su original diseño exterior e interior y por su garantía de siete años. Añade consumos y precios muy ajustados, y le penalizan las limitadas prestaciones del motor básico y un maletero muy pequeño. Se vende en carrocerías de tres y cinco puertas con dos motores de gasolina: el 1.0 de 69 CV de la prueba (9.145 euros) y un 1.2 de 85 CV (12.775).
El Tata Vista y el Fiat Panda alcanzan un empate técnico. El primero aprovecha su mayor tamaño para ofrecer un interior más amplio y tiene el precio imbatible de las marcas low cost: 7.960 euros. Y también sus carencias: calidad de acabado, consumos superiores y equipo de seguridad mínimo y sin opciones. Se vende en versión única: motor 1.4 de gasolina y 75 CV, y con cinco puertas.
El nuevo Fiat Panda mantiene la carrocería monovolumen del anterior, que sigue a la venta como Panda Classic. Pero ahora presenta una imagen e interior más modernos y elaborados, aunque con una capacidad similar. Y le perjudica un precio superior y un equipo de serie justo. Se vende con tres motores: 1.2 de 69 CV de la prueba (desde 8.570 euros), 0.9 Twin Air bicilíndrico de 85 CV (11.324) y 1.3 Multijet turbodiésel de 75 CV (12.012).
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