Un coche para todo con un precio muy razonable. El Rapid es un turismo de tamaño compacto que cumple como familiar y tiene tarifas casi de modelo de bajo coste. Pero no renuncia a una cierta imagen y calidad y ofrece un buen conjunto. Llegará a España en diciembre y costará casi lo mismo que su gemelo, el nuevo Seat Toledo, que saldrá a la venta en noviembre desde 13.990 euros y es el mismo coche con otro traje.
Skoda ha optado por centrarse en los aspectos más importantes de los modelos familiares, como el espacio, el confort y el consumo. Y ha dejado en un segundo plano otros como la potencia -algo justa-, los materiales del interior -salpicadero de plástico duro- y el equipamiento -incluye solo lo básico- para contener el precio. Pero el resultado convence y es uno de los familiares de precio económico más logrados de la oferta actual.
El Rapid es claramente más barato que las carrocerías berlina de los Mazda 3, Opel Astra, Ford Focus y otros rivales similares, pero aporta un habitáculo más desahogado y un maletero mayor con una calidad muy correcta. Y es que en apenas 4,48 metros de longitud, logra integrar un interior amplio, con espacio para todas las tallas tanto delante como atrás, y un maletero enorme de 550 litros. Es el turismo de su tamaño mejor aprovechado por dentro y se acerca tanto a la habitabilidad del Octavia, su hermano mayor (4,57 metros), que la próxima entrega de este modelo (2013), crecerá en tamaño para distinguirse del Rapid.
Además, suma un buen tacto al volante y tiene el aplomo necesario para poder viajar con confort y estabilidad.
En el lanzamiento habrá cinco motores, cuatro de gasolina y un turbodiésel. Los primeros son un 1.2 de 75 CV (6,1 litros de media), dos 1.2 TSi turbo con 86 y 105 CV (5,1 y 5,4 litros) y un 1.4 TSi de 122 CV (5,8 litros). El TDi, por su parte, es un 1.6 de 105 CV (4,4 litros), y en 2013 llegará otro 1.6 TDi de 90 CV (4,3 litros). Todos llevan cambio de cinco marchas, salvo el 1.2 TSi más potente, que equipa uno de seis, y el 1.4 TSi, que solo se ofrece con la caja automática DSG de siete velocidades. Los más recomendables son los dos de 105 CV, porque permiten circular ya con cierta soltura por carretera y autopista y serán más asequibles que el 1.4 TSi.
El equipamiento prescinde de sofisticaciones y recogerá solo lo elemental. Y aunque no está definido todavía, toda la gama incluirá seis airbags, control de estabilidad ESP y, probablemente, también el aire acondicionado.
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